La directora del área de intervención psicológica de la consultora Affor Health, Carmen Rodríguez, afirmó ayer en Burgos que entre el 87 y el 90% del personal sanitario tiene afecciones relacionadas con el estrés, la ansiedad o el estado de ánimo, después de diecinueve meses de pandemia. La experta dio una conferencia en el Fórum sobre 'Riesgos psicosociales y resiliencia del personal sanitario' invitada por el sindicato CSIF, que exige a la Consejería de Sanidad la incorporación de más psicólogos a los servicios de Prevención de Riesgos Laborales de las distintas gerencias sanitarias. En Burgos, señalaron, solo hay uno para toda el área sanitaria, que equivale a la provincia.

Rodríguez explicó que la pandemia estalló cuando buena parte del personal sanitario adolecía ya de alguno de estos problemas. «Es un sector muy impactado a nivel emocional porque son profesiones que llevan asociado un desgaste emocional evidente», dijo la experta, matizando que «la pandemia ha recrudecido lo que ya veíamos: que no estábamos cuidando al sector sanitario». Así, matizó, los profesionales están cansados, estresados, quemados... Y de ahí que urgiera ayer a pasar a la acción: a corto plazo, hacer una intervención psicológica para tratar un daño ya creado y, a medio, desarrollar acciones preventivas eficaces. «A día de hoy, las evaluaciones de riesgos psicosociales se han quedado cortas, son insuficientes porque no provocan medidas adecuadas para minimizar los riesgos», señaló, demandando «evaluaciones más ágiles, más rápidas y con intervenciones proactivas».

En este punto, la experta matizó que siempre se pone el foco en las categorías sanitarias, «que a día de hoy están muy, muy afectadas», pero se detuvo también en las no sanitarias. «Celadores y limpiadores se han visto involucrados y sobrepasados, sin tener ninguna herramienta emocional para hacerle frente (...)».

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