Espectáculo garantizado

C.P.
-

La Vuelta aBurgos 2021, que se disputará entre el 3 y el 7 de agosto, dará el pistoletazo de salida a un mes histórico de ciclismo que concluirá con el inicio de la Vuelta a España

Presentación de la Vuelta a Burgos 2021 en el Monasterio de San Agustín. - Foto: Miguel Ángel Valdivielso

Un año después de que  la Vuelta a Burgos se convirtiera en la elegida para el regreso del ciclismo profesional tras la pandemia, la ronda castellana vuelve entre el 3 y el 7 de agosto con una edición realmente especial y que acaparará de nuevo las miradas de medio mundo. Todo apunta a que los ‘pesos pesados’ del pelotón internacional elegirán las carreteras burgalesas para preparar la Vuelta a España, que saldrá una semana después desde la Catedral.

El cartel que tendrá la carrera es una incógnita porque todavía se está disputando el Tour de Francia, aunque la presencia de 13 equipos World Tour -máxima categoría- de los 21 participantes garantiza la presencia de ciclistas de primerísimo nivel.  «Por lo que hemos hablado hasta ahora con los equipos, tenemos el pálpito de que va a haber muy buena participación», auguró Marcos Moral, director de la Vuelta.

En esa línea se pronunció, José Luis López Cerrón, presidente de la Federación Española de Ciclismo, quien auguró que «Burgos siempre promete» y vaticinó que atraerá a ciclistas de mucha calidad: «Va a tener una participación excelente. La gente que estará en la Vuelta a España, va a querer estar en la Vuelta a Burgos. Con los equipos World Tour está garantizado que vendrán figuras. Habrá ciclistas excelentes y va a ser una carrera muy bonita».

La Catedral, que celebra su VIII Centenario, será el punto de partida de la primera jornada. Como ya es habitual, la meta estará en el Alto del Castillo, al que habrá que subir en dos ocasiones, y que siempre provoca un final de etapa vibrante.

A la mañana siguiente, la caravana ciclista se desplazará hasta Tardajos. Ese es el punto de salida elegido para el segundo día, en el que se recorrerán 175 kilómetros hasta llegar a Briviesca. Es un recorrido llano que invita a pensar en una llegada masiva al esprint, aunque no se puede descartar que el viento prepare alguna escabechina.

El tercer día llegará uno de los platos fuertes con la subida al Picón Blanco. La etapa saldrá de Busto de Bureba y no finalizará en la mítica cima, sino que bajará otra vez hasta Espinosa de los Monteros. Será una de las grandes novedades de la presente edición, ya que no solo harán falta buenas piernas para coronar el Picón, sino que se requerirá de destreza para culminar la victoria después de un descenso muy técnico.

La ronda castellana llegará a la Ribera del Duero en la cuarta jornada, que discurrirá entre Roa y Aranda de Duero. Si el viento lo permite, dará un respiro a los hombres fuertes de la general y será una nueva oportunidad para los esprinters. Un poco de calma antes de que llegue la traca final con el ya mítico ascenso a las Lagunas de Neila. 

Eso será el sábado 7 de agosto en la última y definitiva jornada. El pelotón subirá tres puertos de tercera categoría antes de encarar el ascenso hasta las Lagunas, que decidirán un año más al ganador.

últimos ganadores. La Vuelta a Burgos añade cada edición grandes nombres a su palmarés. Los últimos años ha tenido un protagonismo claro la juventud. La última victoria fue para la promesa belga Remco Evenepoel y los dos años anteriores venció el colombiano Iván Ramiro Sosa. Ambos lograron sus triunfos con 20 y 21 años, respectivamente.

En esa lista de ilustres, está también Mikel Landa (2017), que podría reaparecer en Burgos, Alberto Contador (2016) o Nairo Quintana (2013 y 2014). Precisamente, Contador estará dos días en Burgos acompañando a su equipo, el Kometa Cycling, y a la organización.

La competencia en esta nueva edición, a pesar de que coincide con los Juegos Olímpicos de Tokio, se antoja muy alta, por lo que a buen seguro que se subirá al primer cajón del podio un ciclista de muchos quilates.