La prórroga del contrato de aseo urbano llega en un momento delicado, en medio de un clima de tensión entre los trabajadores del servicio y la concesionaria, Urbaser. Según informan desde el comité de empresa, el conflicto nace después de que ellos hayan reclamado la compensación de los domingos trabajados y un trato igual para toda la plantilla. Los representantes sindicales critican que la empresa "no ha escuchado" sus demandas y mantienen que de seguir así, "sin respuesta ni voluntad negociadora", no descartan "acudir a la huelga". En el comité explican que el convenio fija que por cada domingo o festivo trabajado se conceda un día libre o se pague con el 75% del sueldo de una jornada normal. Esas condiciones, afirman, "no se están cumpliendo en el caso de los domingos".

Las quejas de los representantes sindicales se extienden a un "trato desigual" entre la plantilla. Acusan que hay empleados que casi no hacen festivos o domingos mientras otros acumulan varios. En este sentido, los representantes sindicales sospechan que se puede deber a "castigos" por las demandas iniciadas. En el comité van más allá y afirman haber recibido amenazas por parte de la empresa. "Nos han dicho que si meneamos mucho el árbol, va a haber despidos", sentencian. Ante esta situación, la plantilla está dividida. Existen diferentes categorías y un 40% de los 52 empleados estaría en contra, mientras el otro 60%, a favor de llegar incluso al parón.

Este conflicto lo llevó al pleno del Ayuntamiento el PSOE. Los socialistas defienden que hay que apoyar a los trabajadores y que no se puede mirar a otro lado al ser un servicio municipal. Por eso instan al Ayuntamiento a mediar, por su parte, el concejal del área mantiene que es un tema interno de la empresa, pero si no alcanzaran un acuerdo, abre la puerta a crear una mesa donde el Consistorio sea el mediador.