El Burgos CF se proclamó el domingo campeón del Grupo I de Segunda División B y lo celebró con una nueva victoria, ante el Zamora, por un claro 3-0. La diferencia que tiene en la clasificación provocó incluso que este campeonato lo celebrase antes de jugar, cuando el Celta B culminó su goleada en Valladolid. 20 años después el club burgalés repite  este título aunque ahora falta lo más difícil, sellar el ascenso a Segunda División. Entonces, el inolvidable equipo de Carlos Terrazas lo consiguió; ahora el reto es para la plantilla de Julián Calero. 

Comparar aquel equipo de Terrazas con el actual es complicado pero sí se puede hablar de las trayectorias de ambos proyectos y el dominio que han ejercido durante la Liga.

Carlos Terrazas hizo una plantilla campeona que dominó aquel Grupo II prácticamente desde el inicio de la temporada. Ya en pretemporada daba señales de dominio y el entrenador vasco apuntaló el equipo en el mercado de invierno con la llegada de futbolistas como Zubizarreta o Alberdi. Terrazas llegó a Burgos después de rozar el ascenso con la Gimnástica de Torrelavega y fue la apuesta de José María Quintano para intentar un ascenso que se había escapado por dos veces.

El técnico Julián Calero y Javi Gómez, tras la última victoria del Burgos en El Plantío ante el Zamora. - Foto: Alberto Rodrigo

Era un grupo con la presencia de varios filiales (Athletic B, Alavés B, Osasuna B o Racing B) y el enemigo número uno, la Cultural Leonesa. Pero no hubo oposición. El Burgos CF dominó con mano de hierro la competición y finalizó la Liga con 72 puntos, siete más que la Cultural Leonesa y ocho que Calahorra y Amurrio.

De los 38 partidos, el Burgos ganó 20, empató 12 y perdió 6, con 53 goles a favor y solo 20 en contra. Su dominio fue aún mayor en el play off, en el que disputó seis encuentros, ganó cinco y no perdió ni uno solo. De hecho celebró el ascenso en la penúltima jornada de la liguilla, tras la victoria ante el Ourense en El Plantío.

Esta temporada, la competición ha sido totalmente diferente, con dos fases en las que se jugarán un total de 24 partidos, lejos de loas 38 jornadas habituales. Y la puntuación del Burgos ha sido espectacular. Es cierto que despertó algunas dudas en el inicio, sobre todo tras la derrota en casa ante el Langreo, pero también lo es que ha ido creciendo como equipo y en el tramo final se ha convertido en uno de los principales favoritos para conseguir el ascenso.

Con una plantilla corta, Calero y Michu han tenido que manejar situaciones difíciles, han blindado el vestuario y han formado un grupo compacto y homogéneo que ha llegado en su mejor momento a la parte decisiva de la competición. Ya en la primera parte de la Liga logró en un espectacular tramo final afianzarse en la primera posición, y ahora en apenas cuatro jornadas ha cerrado su primera plaza y se ha proclamado campeón del grupo.

Sus estadísticas no dejan lugar a dudas. Después de 22 partidos ha conseguido ganar 14, empatar cinco y sumar solo tres derrotas. En una competición tan corta ha logrado distanciar a todos sus rivales con claridad, con diez puntos sobre el segundo clasificado y once sobre el tercero.

Llegará en un estado de forma magnífico al play off, tanto a nivel físico como mental, mostrando una concentración que será clave para los momentos más determinantes.

Aquel Burgos de Carlos Terrazas superó a Sabadell, Ceuta y Ourense en la liguilla de ascenso; el actual Burgos tendrá que esperar al 10 de mayo para conocer a sus rivales. Serán dos eliminatorias las que decidan los cuatro equipos que asciendan y muchos aficionados ya sueñan con un nuevo ascenso.