La cuenta general de la Diputación Provincial para 2022 ha quedado aprobada este lunes en el pleno con los únicos votos del equipo de Gobierno que conforman PP y Cs,, y el rechazo del PSOE y de la diputada no adscrita Mar Alcalde, que acusaron al bipartito de no "saber a donde va", y de no tener un proyecto de provincia. No asistió a la sesión Nicasio Gómez, el diputado de Vox, por indisposición.
El presupuesto se eleva a los 137,6 millones de euros, creciendo un 11% más respecto al del pasado año, debido en buena parte al incremento del 13% más que llegarán a las arcas provinciales de los tributos del Estado, un tema que generó debate entre los portavoces del PP, Borja Suárez, y del PSOE, David Jurado. Este lamentó que no se hayan tenido en cuanta todas sus alegaciones, que hubieran supuesto un montante de 1,5 millones más para inversiones, pero el presidente César Rico, que hizo una presentación de las cuentas antes de introducir el debate, las defendió como expansivas y sociales para avanzar en la recuperación tras la pandemia y destacó los 2 millones de euros de incremento de los Planes Provinciales y defendió la existencia del IDJ en contra de la postura que defiende el grupo socialista que pide su desaparición y que se integre en la propia estructura de la Diputación.
Un nutrido grupo de interinos asistió unos minutos al pleno denunciando la situación de fraude de ley en la que están y pidiendo "fijeza ya".