La Consejería de Sanidad incrementó la asistencia en 220 camas y 232 profesionales para hacer frente a la gripe, dado que prevé el pico de incidencia entre las próximas tres y cuatro semanas, según explicó el consejero, Antonio Sáez Aguado, quien recordó que en estos meses invernales los centros sanitarios de Castilla y León presentan habitualmente un aumento de su actividad asistencial motivado, entre otras causas, por coincidir con las semanas de mayor incidencia de la epidemia estacional anual de gripe, lo que suele requerir un incremento de las atenciones en los servicios de urgencias y de las hospitalizaciones.

Para hacer frente a esta situación, que en la tercera semana de enero se situó en los 236 casos por cada 100.000 habitantes, con un nivel de intensidad medio, Sáez señaló que el departamento pone en marcha un año más el ‘Plan de contingencia de invierno 2018-2019’, con el objetivo de organizar la actividad y adaptar los recursos en función del impacto de la epidemia gripal. Ello implica, además de mayor número de camas, ocho médicos más, 99 enfermeros, 96 auxiliares de enfermería y 17 celadores.

“No es un plan cerrado. Si se producen aumentos de incidencia de la gripe se podrían poner más camas y profesionales en los próximos días”, avanzó Sáez, quien especificó que también depende de la afección a los enfermos crónicos.

Así, entre la semana 45 de 2018 y la tercer de 2019 se monitorizan diariamente diversos indicadores para organizar esta respuesta: presión asistencial de consultas y urgencias en Atención Primaria, actividad de emergencias sanitarias, urgencias atendidas, ingresos y altas hospitalarias, índice de ocupación, porcentaje de urgencias ingresadas y suspensiones de cirugía programada.

Hasta el momento, según los datos remitidos por los hospitales públicos de Castilla y León entre el 5 de noviembre de 2018 y el 20 de enero de 2019, no se han registrado “incidencias reseñables”, según el propio consejero. En la tercera semana de este año, el número de urgencias atendidas en los 14 hospitales fue de 21.199, una media de 3.028 urgencias diarias, por lo que se han incrementado un cuatro por ciento respecto a la misma semana de 2018. Por su parte, el índice de ocupación de camas está en un 79,7 por ciento –la media anual es del 71,1- y no se han producido desprogramaciones quirúrgicas por aumento de la demanda en este periodo.

En esta semana 3, el número de ingresos total en los hospitales de Castilla y León fue de 5.309 y el número de altas, de 5.242. Del total de urgencias atendidas fueron ingresado el 16,8 por ciento, proporción similar a la del año anterior. En el caso de la Atención Primaria, la actividad se incrementó entre un cinco y un diez por ciento entre la semana 45 de 2018 y la tercera de 2019. La presión asistencial media de los profesionales fue similar a la del año anterior: la de los médicos de familia en los centros de salud urbanos fue de 38,6 pacientes por día; de 27,5 en el caso de los pediatras y de 17,3 para los profesionales de enfermería; en los centros rurales la presión fue inferior.

Las llamadas con demanda asistencial a emergencias sanitarias se han incrementado en un 13 por ciento, pasando de 4.996 semanales en noviembre a 5.650 en la semana tercera. Por su parte, el teléfono de atención pediátrica recibió en esa semana 511 llamadas de consulta.

En Atención Primaria, a los refuerzos habituales en los fines de semana se ha añadido el incremento en distintas fechas de seis profesionales de enfermería y seis facultativos médicos en diversos centros. Por su parte, la gerencia de emergencias sanitarias ha ampliado el horario de funcionamiento de seis unidades de soporte vital básico la noche del 31 de diciembre.

Incidencia de la gripe

El consejero, que informó de que el desarrollo epidémico gripal este año está “más retrasado”, recordó que en la segunda semana de 2019 la incidencia estimada de síndrome gripal en Castilla y León alcanzó los 87 casos por 100.000 habitantes, por encima del umbral epidémico para esta temporada -51 casos-. Por consiguiente se inició el periodo epidémico estacional. En la tercera, la tasa casi se triplicó, con los 236 casos.

Sáez llamó la atención, por grupos de edad, de los adultos de entre 25 y 75 años, que presentan tasas acumuladas un 50 por ciento superiores a las de la temporada anterior, lo que, de mantenerse esta dinámica, podría suponer un aumento de casos graves y hospitalizaciones en las próximas semanas.

Los virus detectados, tanto en muestras centinelas como en pacientes hospitalizados, se reparten por igual entre el tipo A(H1N1)pdm09 y A(H3N2) y las cepas circulantes en Europa del subtipo H3 podrían estar detrás de esa mayor afectación de la población adulta. El consejero remarco, sin embargo, que “no existe ningún dato que indique problemas de efectividad de la vacuna”. En los datos de la Red centinela los casos vacunados representan el 10 por ciento, similar a temporadas precedentes.