Dos meses hace ya que el Cabildo  nombró a Idoia Larrea gerente de la Catedral, un cargo hasta ahora inexistente y con el que se pretende coordinar la gestión del personal que trabaja en el templo y, a la vez, establecer un nexo de unión entre los trabajadores -en la actualidad hay 24- y el Cabildo. Larrea , guipuzcoana de nacimiento, procede del mundo el voluntariado y desde el año 2002 ha estado trabajando como directora pedagógica de la Escuela Diocesana de Voluntariado de Burgos (Voluntared), entidad que gestiona desde hace años la Oficina Municipal de Voluntariado del Ayuntamiento a través de un convenio.

En una entrevista concedida a la página web del Arzobispado, www.archiburgos.es, Larrea explicó que el encargo del Cabildo "es que la Catedral sea un hogar que acoja a todas las personas que, desde distintas sensibilidades, experiencias y expectativas, ya sea desde una dimensión más cultural, ya sea de fe, o con un interés turístico, se acerquen a ella".