Siempre fue un edificio elegante y evocador, de armoniosa y bella silueta; además, durante décadas fue un lugar bullicioso, lleno de vida. Cuando se llevó a cabo el desvío del ferrocarril, la antigua estación no se quedó varada en la vía muerta del olvido: tras una millonaria inversión, mayoritariamente procedente de Europa, se recuperó con enorme gusto. Sin embargo, perdió lo esencial: actividad. La Estación, como fue rebautizada, lleva un par de años languideciendo como espacio de ocio infantil, juvenil y de nuevas tecnologías. «Claramente desaprovechada», como confiesan fuentes del actual equipo de Gobierno.
Hete aquí que esta situación podría cambiar dentro de poco.Según ha sabido este periódico, la Universidad de Burgos se ha interesado por el remozado inmueble. Y con un proyecto asaz interesante, inspirado en uno similar que funciona a las mil maravillas en la universidad portuguesa de Aveiro, con la que la institución burgalesa colabora desde hace años: la UBU quiere gestionar de forma conjunta con el Consistorio La Estación para desarrollar allí un proyecto que promocione la cultura científica y tecnológica a través de la experimentación a la manera de la Fábrica Centro Ciencia Viva que funciona en Aveiro. No hace todavía un año que el rector de la Universidad de Aveiro, Paulo Jorge dos Santos Gonçalves, acompañado del director de la Fábrica Centro Ciencia Viva, Pedro Pombo, visitó el campus burgalés, donde ambos se entrevistaron con el rector de la UBU y firmaron un convenio de colaboración con el propósito de «trasladar el modelo de la Fábrica a Burgos», proyecto que Pérez Mateos calificó de ‘excelente programa de divulgación científica’».
En esa jornada, los visitantes portugueses visitaron el espacio UBUMaker FabLab Burgos situado en La Estación antes de participar en una reunión con la Unidad de Cultura Científica de la UBU. A la vista de que el Hospital de la Concepción, donde se había pensado desarrollar este proyecto, es un espacio del que dispondrá a más largo plazo, desde la institución académica consideran que La Estación reúne todos los requisitos para desarrollarlo, contribuyendo con ello a dinamizar un inmueble que en la actualidad no cuenta con actividade que saquen el suficiente provecho a sus privilegiadas instalación y a su espléndida ubicación. Manuel Pérez Mateos, rector de la UBU, va a trasladar esta idea a todos los grupos políticos municipales para encontrar un consenso que permita a la Universidad disponer del edificio.
Fuentes consultadas por este periódico ven con buenos ojos la propuesta, conscientes de que el edificio podría dar mucho más de sí. Así, la institución académica daría contenido a la mayoría de las salas de La Estación, reservándose el Consistorio las zonas centrales para seguir llevando a cabo allí iniciativas como las actuales o cediendo esos espacios para otras.
Los destinatarios del proyecto de la UBU serían esencialmente niños y jóvenes...
(Artículo completo en la edición de hoy)