El pasado viernes el Hereda San Pablo afrontaba uno de los desplazamientos más cómodos de la temporada. El sábado jugaba en Badalona y el plan era sencillo, coger el avión en el aeropuerto de Burgos hasta Barcelona y de allí, en un corto desplazamiento, llegar a Badalona. Pues todo salió mal.
El avión no pudo despegar de Villafría y el equipo se tuvo que desplazar hasta Madrid. Allí perdió el vuelo y tuvo que viajar en autobús, llegando de madrugada a Badalona. Y el regreso no fue más sencillo, ya que cuando iba a aterrizar en Burgos el avión acabó en Madrid y desde allí en autobús hasta Burgos.
«Teníamos el viaje más cómodo y se convirtió en el más complicado de la temporada», admitió Tabak.