La Bodega Bosque de Matasnos invertirá tres millones de euros en la construcción de una nueva instalación en Peñaranda de Duero, en concreto en la finca que da nombre a su vino y donde están los viñedos de los que obtiene la uva. «Nuestro objetivo es terminar de consagrar nuestro proyecto vitivinícola en el Bosque, que es donde está toda la actividad de la compañía, excepto la de la elaboración de vino, que hasta ahora la hemos realizado en una bodega de Moradillo y que trasladaremos en el futuro a la finca», explica Jaime Postigo, de Bodegas Bosque de Matasnos. 

La nueva instalación tendrá una superficie de 2.500 metros cuadrados, será una nave elaboradora sencilla y se ha diseñado buscando la integración con el paraje donde va a estar construida para no resaltar de forma negativa. Además, al estar en medio de la naturaleza, dentro de esa finca y alejada del casco urbano, va a ser una edificación 100% autosuficiente. «Utilizaremos materiales de alta calificación energética y todo el consumo que suponga la actividad será generado por nosotros. El agua viene de un pozo, la electricidad de placas solares y la energía térmica de la biomasa que procede de nuestro Bosque», explican desde la empresa, en la que trabajan teniendo en cuenta siempre un mundo más sostenible y por la reducción de la huella de carbono. 

La bodega, que se encuentra actualmente en plena tramitación de diferentes permisos y que podría comenzar a edificarse a lo largo del próximo año, supondrá la creación de cuatro o cinco nuevos puestos de trabajo directos, además de otros tantos de carácter indirecto. Permitirá producir hasta 500.000 kilos de uva, lo que supone unas 400.000 botellas. «Ahora mismo fabricamos 200.000, por lo que con la nueva instalación podríamos duplicar», explican desde la bodega, que va camino de su cosecha número trece, ya que comenzaron a elaborar en el año 2007. 

El Bosque de Matasnos, que se encuentra dirección Hontoria de Valdearados, tiene una extensión total de 240 hectáreas, de las cuales 42 de ellas son de viñedo, 80 de bosque y el resto de cereal. «Producimos y comercializamos uva, miel y cereal, todo ello en ecológico, y también trufas», comentan desde la empresa, que también cuenta con un rebaño de ovejas dentro de este paraje. «Son muy importantes en la sostenibilidad porque nos ayudan a mantener el Bosque limpio, libre de incendios y utilizamos sus excrementos como compostaje». 

El paraje se encuentra a 950 metros de altitud. «Estamos en la franja más alta de España para producir de forma continuada y cualitativa, en la zona de las tierras altas dentro de la DO. Eso tiene un gran valor porque con el cambio climático se buscan zonas más altas para plantar las viñas». 

La construcción que proyecta la empresa en el Bosque de Matasnos es fundamentalmente destinada a la elaboración de vino, pero también contará con una parte «más glamurosa», donde se realizarán catas y se ofrecerá servicio de hostelería, que no estará abierto al público en general, sino que estará reservado para grupos y eventos. «Actualmente tenemos hasta 200 visitas muchos meses, así que si tenemos mejores instalaciones y más preparadas es posible que esa cifra se multiplique», señalan desde la empresa, que de cara al futuro quieren completar el proyecto con la construcción de pequeñas casas distribuidas por la finca como alojamientos hoteleros a lo largo de las 80 hectáreas de bosque. 
La finca ya cuenta con una casa para los trabajadores y naves para la maquinaria agrícola y para las ovejas.