Oña ofrece gratis las visitas guiadas a San Salvador

S.F.L.
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Las localidades de la Mancomunidad Raíces de Castilla buscan fórmulas para mantener las visitas tras la polémica con la Ley de Turismo y sus profesionales, que esperan que se modifique tras las elecciones

La iglesia de San Salvador de Oña ha superado el número de turistas con respecto al año pasado en las mismas fechas.

La Oficina de Turismo de Oña ofrece visitas guiadas al monasterio de San Salvador a todos los grupos de forma altruista.. Antes, el Ayuntamiento cobraba un importe mínimo por recibir las explicaciones del guía local, pero desde que surgió la polémica con la sanción de la Junta a dos trabajadores del turismo  de Lerma por intrusismo laboral y competencia desleal, se ofrece este servicio más personalizado de manera gratuita, solo pagando la entrada.

«Por el momento no hemos sufrido cancelaciones, enseñamos nuestro patrimonio sin cobrar ese plus que había hace meses, así que no hay problema porque estamos cumpliendo con la normativa», declara Cecilio Adrián Haro, párroco de la villa condal. El personal de turismo sigue atendiendo a las agrupaciones organizadas que se trasladan hasta el pueblo o realizan reservas para contemplar el cenobio pero «no pueden anunciarse esos servicios», detalla el cura. A pesar de los inconvenientes que esta medida puede causar a los pueblos más pequeños, Haro reconoce que a estas alturas del año «llevamos más turistas que en 2018. No hemos visto que la cantidad de personas que se acercan a Oña se haya reducido por esta orden». 

Sin embargo, las visitas al casco histórico quedan suspendidas porque tendrían que realizarse de manera voluntaria, sin que el Consistorio se llevase aportación económica. «En nuestro caso, hacemos un gran esfuerzo presupuestario por mantener y promocionar la oficina de turismo. Tenemos descartado contratar a guías profesionales para enseñar nuestro pueblo», declara Berta Tricio, concejal de Turismo del Ayuntamiento oniense y presidenta de la Mancomunidad Raíces de Castilla. 

RENOVARSE O MORIR.

Las mayores perjudicadas de esta normativa son las pequeñas poblaciones y el encargado de la Oficina de Turismo de Poza de la Sal,  Pedro Padrones, reconoce que el visitante busca una explicación personalizada de la historia de la villa salinera. «Como el Ayuntamiento no puede permitirse la contratación del servicio de guías oficiales, se ha decidido ofrecer audioguías a partir del 1 de julio. No es lo mismo recibir la información de una persona que de un aparato electrónico, pero es la única opción que tenemos para que los turistas entiendan y conozcan el pueblo, sus tradiciones, su cultura y patrimonio». Gracias a este sistema, los viajeros podrán adquirir los conocimientos necesarios ya que en la narración del audio se describirán los lugares más emblemáticos del municipio como son el casco histórico, el castillo o las salinas. Por ahora, se trabaja con un audioguía colectivo que sale gratis a los visitantes que han sido alrededor de 8.000 los que han estado en Poza durante este año. 

Los alcaldes de las tres localidades que forman la Mancomunidad Raíces de Castilla -Oña, Frías y Poza de la Sal- seguirán luchando para intentar conseguir que la Ley de Turismo se modifique, por el bien de los pueblos y por el de la Comunidad Autónoma. El alcalde pozano, José Tomás López, aclara que para ellos «esta normativa ha resultado un contratiempo importantísimo, ya que el servicio de guías locales lo cubría, hasta hace dos meses, gente del pueblo».

En Frías están esperando a que el nuevo gobierno de la Junta tome alguna decisión después de las elecciones. «Ojalá nos ayuden porque este servicio llevamos dándolo desde hace más de 25 años», manifiesta María Ángeles Bergado, teniente alcalde de la ciudad más pequeña de España. Pese a los obstáculos de los últimos meses a la hora de mostrar la localidad desde el punto de vista de un guía local, cada vez más personas se acercan a la ciudad medieval. «En lo que llevamos de año nos han visitado 23.299 turistas. Notamos que cada vez viene más gente, solo en el mes de mayo han pasado por este local casi 6.000», transmite una trabajadora de la oficina de turismo.

La Ley de Turismo de 2010 exige que los guías locales no puedan realizar visitas con aportación económica, únicamente están autorizados los homologados. Para las zonas más alejadas de las ciudades, es una traba para promocionarse.