'Amor, curiosidad, prozac y dudas' se convertirá en serie

Charo Barrios
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La secuela del exitoso debut literario de Lucía Etxebarria hace 25 años será llevada a la pequeña pantalla por la productora Telespan, responsable de sagas como 'Doctor Mateo' o 'Con el culo al aire'

Telespan, compañía del grupo Vértice 360, convertirá en una serie de televisión el bestseller de Lucía Etxebarria publicado en 1996 Amor, curiosidad, prozac y dudas, una novela sobre la difícil búsqueda de la identidad femenina, según confirmó recientemente la firma audiovisual en un comunicado.

La primera novela de la valenciana sigue siendo un claro referente feminista, de ahí que la productora de sagas como Doctor Mateo o Con el culo al aire haya puesto sus ojos en esa obra en un proyecto en el que la propia autora está muy involucrada.

Asimismo, la adaptación incorporará la esperada secuela de la novela, con prólogo e ilustraciones de Etxebarria: «En su día, esos dibujos no figuraron en el libro, y ahora, por primera vez en el trabajo de adaptación audiovisual de un bestseller, se escribe la continuación de la obra a cargo de la escritora».

La valenciana trabajará junto al guionista y director cinematográfico Pedro Barbero, responsable de desarrollo de ficción de Telespan, para desarrollar la historia de las tres hermanas protagonistas -Rosa, Cristina y Ana- que marcó un antes y un después en la literatura española de los 90.

«Hace 25 años yo no hubiera podido ni imaginar que este libro que habla de sexismo, abuso sexual, discriminación laboral, cosificación, desigual reparto de las tareas domésticas... seguiría vigente ahora», reconoce la literata, de 54 años (los estrenó el pasado lunes). Mucho menos, que la vida de sus protagonistas se convertiría en material audiovisual.

«Es un gran acontecimiento que por primera vez la secuela de una obra se pueda disfrutar antes en la pequeña pantalla», continúa el comunicado de Telespan.  

Es decir, la serie no nos llevará a los años 90, sino que traerá a las protagonistas hasta 2020, y así sabremos qué ha sido de Ana, Rosa y Cristina, a las que conocimos como hijas y ya son madres, y tanto en su vida personal como en la profesional afrontan problemas que en su tiempo se antojaban impensables, aunque la semilla de estos tiempos estaba ya en aquellos.

 

Un antes y un después

Etxebarria trabajará junto al guionista y director Pedro Barbero, responsable de desarrollo de ficción de Telespan, para desarrollar la historia de las tres hermanas protagonistas que marcó un antes y un después en la literatura española de hace un cuarto de siglo.

Con solo 28 otoños, la levantina escribió Amor, curiosidad, prozac y dudas. La novela vio la luz algo después, en el 97, un año antes de ganar el Premio Nadal con Beatriz y los cuerpos celestes y antes también de obtener el Planeta con Un milagro en equilibrio. Pero esas son otras historias.

Admite la escritora que nunca vislumbró lo que sucedería con su texto, que se traduciría a 22 idiomas o que sería de obligada lectura en varias universidades. 

A la pregunta de si tiene explicación para ese éxito, si se explica que, un cuarto de siglo después, cuando el mundo ha cambiado tanto y tan deprisa, la novela siga teniendo la actualidad que tiene. Responde recordando cómo era el mundo entonces, y cómo es ahora: «La pornografía se movía por revistas, películas o vídeos; ahora, ha saltado a internet y se ha convertido en un negocio aún más millonario. Entonces, no había móviles; ahora, el 25 por ciento de las adolescentes afirman haber sufrido control abusivo a través del teléfono móvil. En aquella época, las mujeres eran juzgadas por su apariencia, y lamentaban que así fuera; ahora el culto al cuerpo y el cultivo de la imagen son una nueva religión. Muchas mujeres vivían dedicadas a la casa y los hijos; ahora, las mujeres quieren trabajar, pero son mayoría en las listas del paro».

Recalca Etxebarria que en 1995 nadie hablaba de violencia de género «porque la expresión aún no había sido acuñada; lo cual no significa que no la hubiera... como ahora». «No se hablaba, al menos no mucho, de acoso ni abuso sexual; hoy sabemos que, en España, el 80 por ciento de las violaciones, el 61 por ciento de los intentos de agresión sexual y el 34,4 de los tocamientos son cometidos por familiares masculinos, amigos o conocidos de la víctima». Recuerda que en su día, su entonces jefa de prensa le previno: «No digas por favor que eres feminista, que eso arruinará el libro». Por eso se felicita, pues «hoy el feminismo está más vigente que nunca y aunque nos llamen feminazis, aunque se rían de nuestro cuerpo, aunque te digan que siendo feminista no se liga, seguimos avanzando y estamos más vigentes que nunca».