Julián Calero, entrenador del Burgos CF, lamentó que su equipo no aprovechase las dos claras ocasiones de la primera parte para colocarse con 2-0 y afrontar la segunda mitad con más garantías. Pese a la importancia de estos tres puntos y solo lograr uno, recordó que el objetivo del Burgos es salvar la categoría y de momento el equipo está por encima de los puestos de descenso.

«La justicia en el fútbol es relativa. En la primera parte pudimos sentenciar el encuentro con varias ocasiones muy claras. Después llegó el golpe del empate y en la segunda parte estuvimos menos frescos. A partir del minuto 70 el partido se volvió loco. A veces convertimos los partidos en esa locura y hemos preferido buscar de esta manera la victoria», declaró el entrenador del Burgos, que lamentó «algo más de fortuna» para lograr la victoria, una victoria que comienza a ser necesaria.

Calero cree que lo que pasó en los primeros 45 minutos condicionaron la segunda mitad. «Pudimos irnos al descanso con una ventaja más amplia y eso hubiese hecho diferente la segunda parte. Hemos sumado un punto, aunque queríamos los tres. Para nosotros cada partido es una batalla y por trabajo y esfuerzo de los jugadores no va a ser. Vamos a seguir».

El Burgos sigue por encima de los puestos de descenso y Calero pide analizar la situación «en su contexto». «¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos?. El equipo está peleando donde sabíamos que estaría. Hay que mantener la calma, estamos dentro de la línea que pensábamos. El objetivo es salvar la categoría y este equipo se va a salvar (...)».

(Más información e imágenes, en la edición impresa de Diario de Burgos de este lunes)