Si ya era mínimo el plazo que iba a tener el Ejecutivo de coalición para poder ejecutar (o al menos comprometer) antes de final de año el gasto de los 11,4 millones de euros de la modificación presupuestaria que se aprobó el pasado 6 de noviembre en el Pleno, ahora el margen se ha convertido ya en exiguo. El PP cumplió su amenaza, presentó ayer, el último día de plazo posible, alegaciones contra el acuerdo plenario y eso provocará que se retrase la entrada en vigor de la modificación del Presupuesto.

El retraso se producirá porque de no haberse presentado ninguna alegación (de momento solo se conocen las entregadas por el PP), la modificación se habría podido publicar en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) y entrado en vigor de manera inmediata. Ahora será necesario, una vez resueltas, que supere el filtro de la comisión de Hacienda, se ratifique en el Pleno y ya entonces se envíe el BOP. Todo ello, con la inminente llegada del puente de la Constitución y con la administración cerrada.

Parece complicado que todos estos trámites se puedan resolver antes del 21 o el 22 de diciembre. Y a partir de ahí tocará correr (algo muy complicado en las administraciones) para poder comprometer los diferentes gastos en inversiones y actuaciones antes del día 31 (...).

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