La alcaldesa de Miranda ha mantenido durante esta crisis sanitaria una prudencia extrema en lo que respecta a las medidas adoptadas por la Junta de Castilla y León. Su postura se ha cuestionado por exceso, aunque la decisión de no hacer los cribados masivos de antígenos en la ciudad ha hecho que la responsable municipal salte en defensa de sus vecinos. "La lealtad no es sumisión", sostuvo Aitana Hernando, quien afirmó que en su opinión la evolución de los contagios en Burgos representa el motivo real por el cual los test no llegarán por el momento.

En las reuniones con la Consejería de Sanidad, la alcaldesa ha transmitido que ve en el cribado "una buena herramienta", para detectar los enfermos asintomáticos y frenar la transmisión del virus. Dentro de las conversaciones a este respecto, incluso se fijó que se harían en el Polideportivo "y nos quedamos en que se nos diría un fin de semana", reconoce Hernando, que añadió que la idea inicial era hacerlos en la localidad leonesa de San Andrés de Rabanedo y luego en Miranda.

El paso no se dio "porque de repente se nos dice que los resultados estaban mejorando". Estas explicaciones no convencieron a la alcaldesa, quien cree que "la realidad es que en estos momentos necesitan destinar todos sus recursos a Burgos". Dentro de las conversaciones con la consejera, Hernando aclaró que se había transmitido que "si esta herramienta era positiva ayer, lo sigue siendo hoy", pero por parte de los responsables regionales se apela al descenso en la incidencia, que todavía se mantiene próxima a los 500 casos por cada 100.000 habitantes, aunque se llegaron a sobrepasar los 1.700.

En base a esta mejoría, "se me dijo que se iban a incrementar el número de test en Atención Primaria y en Urgencias, aunque no fueran de manera masiva", matizó Hernando, quien recalcó que ahora los antígenos se llevan a Burgos "porque está fatal, pero es que Miranda también lo ha estado".

Al margen de los cribados generales, por parte de organizaciones empresariales como FAE se ha planteado la necesidad de establecer un Arca de Noé, para dar cabida a los positivos que no pueden aislarse en sus domicilios. Esta alternativa se trasladó a los responsables de Sanidad de la Junta "pero en ningún momento nos lo ha pedido, pero supongo que no se ha tenido en cuenta porque por el momento no se ha visto necesaria esta herramienta", analizó Hernando.

A pesar de esta posición en lo que se refiere a la gestión de la pandemia, Hernando dejó claro que "el Ayuntamiento no va a dejar de trabajar con la Junta, pero habrá cosas que nos parezcan bien y otras que no".