El compromiso de Pedro Sánchez de que los españoles paguen este año lo mismo por la electricidad que en el 2018, cuando llegó al Gobierno, se vuelve cada vez más difícil con los nuevos incrementos en el mercado mayorista y la inminente temporada de frío.

Según un cálculo de la asociación de consumidores Facua, la factura debería bajar más de un 60% lo queda de año para que se cumpla esa promesa del presidente. Hasta ahora, «el recibo del usuario medio acumula en lo que va de 2021 una subida del 12,5%», denunció ayer la asociación de consumidores, de 77,18 a 86,80 euros.

En los últimos tres meses, los consumidores han sufrido los recibos más caros de la Historia de forma consecutiva. Hasta el pasado agosto, cuando la factura media ascendió a 93,10 euros, el recibo más caro de la historia había sido el del primer trimestre de 2012, con 88,66 euros mensuales -con el IVA al 18%-. El pasado septiembre se situó en 102,71 y en octubre en 120,68 euros.

En la primera quincena de noviembre, la evolución de la tarifa regulada -el denominado PVPC- arroja un coste mensual de 102,35 euros, un 49,4% por encima de los 68,50 euros del mismo mes del año pasado.

Facua critica que «el Gobierno sigue sin acometer nuevas medidas para reducir las tarifas eléctricas una vez que se han mostrado claramente insuficientes las llevadas a cabo», como la rebaja del IVA, la suspensión de impuestos a la generación y la reducción al mínimo del impuesto a la electricidad, así como la minoración de los beneficios caídos del cielo.

A pesar de ello, el Gobierno insistió en que se cumplirá el compromiso de Sánchez. La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, indicó que este Ejecutivo tiene «compromisos claros que cumplir en materia del coste de la electricidad y los va a cumplir a finales de año», a solo mes y medio para que acabe 2021.