Solución para las grietas de Villatoro una década después

C.M.
-

El coportavoz del equipo de Gobierno, Vicente Marañón, asegura que la construcción de los pozos se iniciará en febrero o marzo y posteriormente habrá un estudio que seguirá la evolución de las aguas subterráneas durante tres años

Vista de las grietas que se han producido en algunas casas del barrio. - Foto: Luis López Araico

La solución al problema de las aguas subterráneas en el barrio de Villatoro está más cerca. Se espera que en febrero o marzo se inicie la construcción de los pozos que desvíen el agua y también se hará un seguimiento de la evolución durante los próximos tres años. El contrato sale a concurso por 700.000 euros y las empresas interesadas disponen hasta el 3 de noviembre para presentar sus ofertas. 

Las actuaciones consisten en la ejecución de una obra de drenaje de las aguas subterráneas del acuífero aluvial, transversal al arroyo de Villatoro, aguas arriba del núcleo de Villatoro y evacuación de los caudales captados mediante la adecuación del cauce.

También se hará el inventario detallado de los daños estructurales producidos por los asentamientos en las edificaciones y otros elementos de la urbanización,  el seguimiento de los asentamientos tras la puesta en funcionamiento de la obra de drenaje de las aguas subterráneas y el estudio hidrogeológico y el seguimiento del comportamiento geotécnico se prolongarán durante tres años, tiempo que se estima suficiente para el adecuado seguimiento de la eficacia de la solución de drenaje del aluvial a realizar y para una más profunda caracterización del problema existente.

El planteamiento trata de aunar, por un lado, una postura resolutiva de la problemática situación que los asentamientos del terreno están produciendo en este barrio mediante la ejecución de la obra de drenaje propuesta según los estudios previos del Instituto Geológico de España, y por otro, un seguimiento técnicamente correcto, extenso y con duración temporal suficiente para la revisión de los efectos de las obras en el terreno y las edificaciones, y la mejora del conocimiento de los procesos hidrogeológicos relacionados con los asentamientos.

Dadas las características de los daños producidos y la problemática existente resulta fundamental que la población facilite la recopilación de información por parte de los técnicos, dando acceso a las fincas para la realización de trabajos de seguimiento tales como: medición de la evolución de asentamientos, registro de caudales bombeados en el drenaje de sótanos, toma de muestras de agua, etc.

El seguimiento hidrogeológico consistirá en el reconocimiento detallado de los puntos de agua y de las características de los acuíferos y materiales yesíferos de la zona, el seguimiento de la evolución en continuo de los niveles y de las características hidroquímicas del agua en diversos puntos del acuífero, para lo cual se perforarán varios sondeos que quedarán instalados para el registro y toma de muestras, seguimiento de las extracciones de agua subterránea, análisis de las interacciones con la red de saneamiento, abastecimiento y otras fuentes posibles de agua externas al acuífero aluvial, aforos diferenciales en el arroyo, etc. Todas las mediciones hidrogeológicas, debidamente analizadas y combinadas con los registros de auscultación de los asentamientos y daños geotécnicos, serán integrados en informes, trimestrales y anuales, hasta el fin de esta etapa de seguimiento y caracterización.

La actuación afecta a 1.359 metros de arroyo y se tiene previsto la tala de 10 árboles y los arbustos necesarios, presentes en el arroyo. La reintegración medioambiental se realiza mayoritariamente mediante estaquillas de Salix.