La gran riada que bajó por el arroyo de la Degollada, en Toledo, tras las fuertes tormentas de la semana pasada sacó a la superficie innumerables objetos de todo tipo y condición, incluso dos proyectiles de la Guerra Civil. Es habitual ver en los cauces de los ríos que atraviesan la ciudad, especialmente en el Arlanzón y el Vena, carritos de la compra, extintores, señales de tráfico, botellas, sillas, colchones y hasta bicicletas del servicio de préstamo Bicibur. Hace pocos días llegó a haber una maleta en el tramo junto al Arco de Santa María, en plena zona turística. 

En el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento lo saben, dado que reciben directamente las quejas que llegan desde el Servicio de Información y Atención Ciudadana 010. Sin embargo, estos comportamientos incívicos no solo dañan esos corredores ecológicos de los que disfrutamos los burgaleses sino que la acumulación de objetos en los cauces, además de vegetación y ramas, pueden llegar a obstruir los puentes o otras zonas de los ríos y producir riadas si hay fuertes tormentas. 

La empresa que se encarga de la limpieza viaria, Semat, acude a la retirada puntual de la basuras y con los planes de empleo municipales se actúa en las orillas para limpiar la maleza. Sin embargo, la Concejalía de Medio Ambiente, capitaneada por el concejal Josué Temiño, ha querido dar un paso más allá y contratar la retirada de residuos de cauces y zonas de servidumbre de paso de los ríos Arlanzón (19,5 kilómetros), Vena (9,63), Pico (4,17), Ubierna (2,91) y Cardeñadijo (0,95) dentro del término municipal. 

En total se actuará sobre 36,81 kilómetros aunque en el caso del Arlanzón se deberá limpiar todo el trazado continuo desde la entrada en el término municipal hasta su salida por Tardajos. «No hemos visto grandes residuos, quizás lo más voluminosos han sido colchones o carros de la compra. El problema  es que si no se limpian los ríos con asiduidad hay partes dentro de ellos que están en desnivel y los residuos se acumulan. Ello hace que se formen presas con la basura y pueden producirse problemas de riadas en caso de lluvias abundantes», señaló el concejal de Medio Ambiente.

En este sentido, afirmó que es difícil que esto suceda en el caso del río Arlanzón al contar con un gran cauce pero sí en el Pico o Cardeñadijo. «Además hay que tener en cuenta que por los cauces de los ríos bajan troncos y ramas de árboles y todo ello se puede acumular en determinadas partes como pueden ser el humedal de Fuentes Blancas o La Ventilla y hacer que se desborde la avenida», añadió.

La Concejalía de Medio Ambiente dispone de una partida de 13.300 euros para este cometido, gracias a la modificación presupuestaria aprobada en julio. La idea es contratar a una empresa especializada y ya se ha pedido presupuesto a cinco al tratarse de un contrato menor. 

Los trabajos deberán iniciarse en octubre y tengan una duración de dos meses, de modo que para finales de noviembre estén concluidos. «Requieren entrar en los cauces con vadeadores, maquinaria o balsas. Por el ejemplo, la profundidad del río Arlanzón no es elevada por el centro pero sí en otros tramos», apuntó Temiño.

Según el pliego de condiciones, la empresa adjudicataria deberá retirar cualquier tipo de residuos existente, orgánicos e inorgánicos, así como también los restos vegetales que han sido trasladados por las avenidas y han quedado depositados contra cualquier obstáculo. Por ello, los operarios deberán desplazarse por las orillas y el cauce y contar con los elementos necesarios como botas de agua, vadeadores, diferentes herramientas e, incluso, barca o piragua si fuera necesario, dado que la zona embalsada de Fuente del Prior también está incluida en esta actuación. 

La idea es comenzar por el río Arlanzón y, una vez finalizados los trabajos en el mismo, actuar en el Vena y luego por los otros tres cauces. Hasta ahora la empresa que se encarga de la limpieza viaria, Semat, recoge las papeleras que hay en algunas zonas de los ríos, las accesibles, mientras que con los trabajadores que se contratan cada año dentro de los planes de empleo municipales se actúa en la limpieza de la vegetación pero no se ha hecho una actuación en profundidad como la prevista para dejar sin residuos tanto las orillas como los cauces de los cinco ríos. 

De manera periódica. El concejal de Medio Ambiente espera que la experiencia sea positiva y se consiga dejar limpios los ríos pero el objetivo de la Concejalía es que pudieran encargarse estos trabajos de manera periódica. «El objetivo es sanear los ríos este primer año y luego ir repitiendo la limpieza para mantenerlos». 

También hace especial hincapié en la necesidad de concienciar a los ciudadanos para que no arroguen residuos al río, no solo en las riberas sino tampoco en los cauces. «No es el lugar para arrojar este tipo de residuos y su limpieza supone un gasto muy importante para el Ayuntamiento».

En este sentido, subrayó que el nuevo contrato de puntos limpios ampliará el horario de estas dos instalaciones ubicadas junto al HUBUy al Camino de Valdechoque en las que deben depositarse este tipo de objetos y abrirán los también los domingos. 

Finalmente, el edil de Medio Ambiente reclamó sanciones «ejemplarizantes» para las personas que arrojan basura y otro tipo de objetos no solo en los ríos sino también en diferentes espacios públicos (botellones o escombreras).