El San Pablo ganó con comodidad (86-72) al Valladolid y conquistó su cuarta Copa de Castilla y León consecutiva. Los burgaleses comenzaron muy bien, se durmieron en el segundo cuarto y luego se recompusieron para acabar llevándose el triunfo. Lima fue el mejor de la final gracias a sus 12 puntos y ocho rebotes que le dieron un 23 de valoración, aunque también fue destacable la actuación de Tokoto, que rompió el partido en el último tramo, en el que sacó a relucir su poderío para apagar las esperanzas pucelanas.