El hundimiento de la calzada y la acera entre los números 40 y 53 de la avenida de los Reyes Católicos se ha agravado y extendido en las últimas semanas y los socavones han obligado al área de Vías Públicas, Conservación y Mantenimiento a colocar señales de alerta para que los conductores circulen por ese tramo a 20 kilómetros a la hora, así como también señales que alertan de badenes. 

La recomendación de moderar la velocidad se mantendrá hasta que se ejecuten las obras que sean necesarias para solucionar un problema.Sin embargo, la solución a adoptar depende de la elaboración de un proyecto que defina técnicamente lo que hay que hacer y que sirva también para la licitación posterior de la ejecución de los trabajos. El pliego de condiciones está elaborado desde hace meses pero se encuentra en el área de Contratación para continuar con su tramitación. El presupuesto es de 22.000 euros y un plazo de ejecución de tres meses. 

El concejal del área, Julio Rodríguez-Vigil muestra su preocupación por la situación de esta vía, que además es muy transitada para llegar al centro de la ciudad. «Nos preocupa el hundimiento, dado que se ha ampliado y estamos a la espera de sacar el contrato. No se puede hacer más a la espera de convocar la redacción del proyecto», aseguró.

La causas del hundimiento no están claras aunque los técnicos municipales apuntan a un «paleocauce del río Vena, que de alguna forma está deslavando el subsuelo o socavando y haciendo que se produzca un asentamiento que en la actualidad supera los 30 centímetros de profundidad. También advierten de que las consecuencias a futuro pueden llegar a ser «importantes».    

El Ayuntamiento ya realizó hasta en dos ocasiones la reparación de sendos hundimientos de similar envergadura, en el lado de los números impares, habiéndose vuelto a reproducir a los pocos años, por lo que está claro que cualquier labor de reparación con intención de futuro tendrá que pasar por la realización, dentro del proyecto, de un estudio geológico y geotécnico de suficiente envergadura como para detectar y solucionar las causas que están produciendo este deterioro. También advierten de que las consecuencias a futuro pueden llegar a ser «importantes».

El problema afecta a la calzada, la acera y la zona de aparcamiento en zona azul a ambos lados de la avenida aunque la situación es peor en el lado del edificio de los juzgados. En esta zona se observa también el hundimiento de un jardín que da al aparcamiento subterráneo de este emplazamiento. 

Lo cierto es que el problema se observa a simple vista pero cuando se circula en coche se nota como se sube y se baja en las ondulaciones que se han producido en el asfalto. «Es necesario saber qué está pasando en el subsuelo», añadió el concejal. 

Precaución. Mientras tanto no se puede hacer mucho más que circular por la zona con precaución aunque algunos conductores ya han expresado su temor a la hora de tomar esta vía, que es muy transitada para llegar al centro de la ciudad desde el G-3 o Gamonal. Además, el edificio de los juzgados atraer mucho movimiento de personas y vehículos a diario.

También se observan los socavones en el caso de que se transite a pie, dado que las aceras también están hundidas.