No hace falta presentar a Fofito. Da igual que quien lea esto tenga 60, 40, 20 años o sea menor de edad. Solo hace faltar lanzar la pregunta ¿Cómo están ustedes? o empezar a cantar Hola don Pepito, Cómo me pica la nariz o La gallina Turuleca y le habrán ubicado sin más pistas. El hijo de Fofó fue uno de Los Payasos de la Tele junto a Gaby, Miliki y Milikito, y lleva más de 50 años haciendo reír a niños y niñas de tropecientas generaciones. Sin embargo, lo de salir a la pista sigue embargándole como siempre. «Sigo teniendo los mismos nervios que las primeras veces porque tienes la obligación de hacer reír. El trapecista hace su número y ya está. El payaso tiene que ganarse primero la sonrisa para conseguir la carcajada».
A sus setenta y un años es consciente de que cada vez es más complicado sorprender a los pequeños, que llegan al circo o a cualquier parte curtidos con todo tipo de distracciones. «A veces es difícil que una parodia o un chiste les cause sorpresa porque se lo saben todo. Pero ahí está el secreto de Fofito: guardarles un final que no se esperan. Tampoco puedo desvelarlo porque es algo que la familia Aragón nos vamos pasando unos a otros, porque el repertorio que yo hago lo podría hacer mi primo Emilio (el hijo de Miliki)o salir los dos juntos sin haberlo ensayado antes».
El payaso dice y aparenta estar en plena forma, «tanta como para ponerme a correr una maratón», y sin intención de jubilarse, salvo que sea con las botas puestas. «Pero que me las pongan, porque para eso ya no estoy», bromea.
Fofito ha vivido muchas adaptaciones del circo y del mundo del espectáculo y los payasos, aunque donde más tiempo ha pasado y con más éxito ha sido en la televisión. ¡Y vaya si ha cambiado el medio! «Lo que nunca me imaginaba vivir es una pandemia, pero de todo se sale», apunta el actor, que ha tenido también sus buenos y no tan buenos tiempos ante los focos. «Desde hace dos meses siento que la gente quiere ir al teatro y al circo, que hay ganas de función y que los aplausos son reales. Sé que el nuestro es un negocio que ha pasado muchos baches, pero mientras haya un niño, habrá un circo».
En el Holiday la ovación le llega arropado por su hija Mónica Aragón, actriz de cine y teatro que aquí hace el papel de payaso serio, el que interpretaba Gaby en Los Payasos de la Tele. «Los niños lo pillan ahora como siempre. Ella hace de lista, yo soy el tonto y al final siempre salgo ganando yo. Los tontos son muy listos», dice mostrando en su rostro esa expresión guasona que todos reconocemos de Fofito.
Ambos describen el espectáculo como dos en uno: la parte de los números de equilibrios y el más difícil todavía, «lo que es puro, puro circo», y una segunda parte a cargo de ellos, «con las famosas canciones que cantaba Fofó, las aventuras que veías en televisión y los musicales que hemos hecho». En resumen, 45 minutos con los secretos de la familia Aragón.