El Ayuntamiento está obligado por sentencia a reparar las humedades del aparcamiento subterráneo situado bajo la plaza, que se dañó como consecuencia de una remodelación anterior. Encargó la redacción de un proyecto previendo un coste de 1,2 millones de euros en la reparación pero los técnicos cifraron en 2,3 millones de euros el coste de la reparación. Ahora se han hecho ajustes en el mismo relacionados con el mobiliario urbano y se ha rebajado en 200.000 euros. El concejal de Fomento, Daniel Garabito, subrayó que se ha pedido a los grupos municipales un compromiso para destinar 1,2 millones en 2020 y el resto en 2021 (743.564 euros) para realizar la obra. "Desde los juzgados ya nos han hecho dos requerimientos para que actuemos.", indicó.
Por ello, en el Pleno del viernes se pretenden alcanzar un compromiso de todos los grupos municipales de la necesidad de realizar esta invesión haya o no presupuestos. En el consejo de la gerencia de Fomento solo el PSOE y Ciudadanos votaron a favor mientras que el PP y Vox lo hicieron en contra. El portavoz del PP, Javier Lacalle, justicó su voto en contra en que no se conoce el proyecto y en que la petición del equipo de Gobierno no viene avalada por un informe de la Comisión de Hacienda, que en su opinión es el órgano que debe acordarlo.
La reparación de las humedades del aparcamiento obligará a levantar todo el forjado de la plaza de Santiago y cambiar la pendiente de la superficie para que el agua de lluvia se vierta hacia afuera. También obligará a cambiar todas las redes de saneamiento, comunicaciones o iluminación y sacarlas al perímetro, dado que todos estos elementos dañan la impermeabialización, según el proyecto.
Según explicó el concejal del área, Daniel Garabito, la plaza tiene 6.000 metros cuadrados y todo el agua de lluvia que se recoge se introduce dentro del aparcamiento desde el subsuelo y desde allí se bombea hacia la red de alcantarillado, lo que está causando humedades. El hecho de que las diferentes redes de servicios estén en el interior también causan este problema. "La plaza hay que levantarla entera. Es la única manera de reparar una impermeabilización dañada de manera generalizada".
De este modo, se generarán nuevas pendientes para que el agua se deslice fuera de la plaza y vaya a la red de alcantarillado.
En cuanto al árbolado, se mantendrán la cuarta parte de los ejemplares y también se cambiará la iluminación. Se intalarán torres similares a las de la plaza del Rey San Fernando y se colorarán en el perímetro de la plaza. "El Ayuntamiento hace un esfuerzo para mantener los árboles pero son un elemento que complica la impermeabilización", añadió Garabito.