Regresa el fútbol al estadio municipal El Montecillo. La Arandina recibe esta tarde al Almazán (20.15h.) en la novena jornada de liga en el Grupo VIII en un duelo con varias caras sorianas reconocibles entre la parroquia ribereña (Miranda, Plaza, De Miguel, Antón y el propio Diego Rojas), y que bien podría servir a la entidad blanquiazul para recuperar terreno perdido respecto a la zona de playoff.

Partido duro, no obstante, para el equipo que dirige Jordi Fabregat. Con un Almazán «compacto» y que «defensivamente sabe lo que hace», (también en racha tras sumar 10 de los últimos 12 puntos en juego), el técnico catalán asume que su próximo adversario aterrizará hoy en la capital ribereña con «ilusión» y, además, con la «ligereza que dan los puntos», pensando que «este partido podría auparles a una cosa impensable al inicio de temporada».

Escenario sobre el que la Arandina deberá moverse con precaución y para el que Fabregat no podrá contar ni con Moha, aquejado de una distensión de ligamentos, ni con Soto quien, con una pequeña rotura fibrilar, deberá permanecer alejado de los terrenos de juego unas tres semanas. Al margen de ello, Diego Abad también se sitúa «entre algodones» para la cita. Un punto que, como ha reconocido el propio míster, acelerará el proceso de incorporaciones con piezas que tengan «diferentes características» a lo que ya hay, y que bien podría definirse antes de que finalice esta semana.