15 positivos por alcohol o drogas en 870 pruebas realizadas

DB
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Entre los resultados positivos se contabilizan tres delitos contra la Seguridad Vial por los que se instruyeron diligencias

855 pruebas de alcoholemia y 15 de drogas el fin de semana

Quince conductores han dado positivo por alcoholemia o drogas este pasado fin de semana en los 870 controles realizados por el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil en las carreteras burgalesas.

Entre las cinco de la tarde del viernes, 23 de abril, festivo por ser el Día de Castilla y León, y las seis de la mañana de este lunes, los agentes han realizado un total de 855 pruebas de alcoholemia en la provincia, de las que nueve resultaron positivas. Entre ellas se contabilizaron tres delitos contra la Seguridad Vial por los que se instruyeron diligencias, mientras que los otros seis positivos se saldaron con sendas denuncias administrativas.

Durante el mismo periodo de tiempo, 15 conductores han realizado la prueba de drogas y estupefacientes, resultando seis casos positivos, por los que se tramitaron los correspondientes boletines de denuncia por infracción al Reglamento General de Circulación.

El total de pruebas fueron realizadas en controles dispuestos en orden a la prevención de la seguridad vial.

La ingesta de bebidas alcohólicas así como la de drogas y sustancias tóxicas, recuerda la Benemérita, influye en el conductor de un vehículo con la disminución de la capacidad sensorial, de reflejos y de atención en la conducción, desvirtuando la percepción de la realidad, determinando una conducción inapropiada y creando un concreto peligro para la vida propia y del resto de los usuarios de la vía, aumentando exponencialmente la posibilidad de sufrir un siniestro vial.

Estas conductas al volante, además, pueden conllevar administrativamente hasta 1.000 euros de sanción y penalmente podrán ser castigadas con la pena de prisión de tres a seis meses o con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a 90 días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años, apuntan fuentes de la Guardia Civil.