Fernando Sánchez Cipitria lleva ocho años viviendo en China. El gigante asiático le dio la oportunidad de desarrollarse como entrenador de fútbol, después de una carrera como jugador en la que ganó el título de Liga con el Deportivo de la Coruña en el año 2000. Tras pasar seis años en la provincia de Cantón, al sureste del país, el 1 de enero de 2019 fichó por el Xinjiang Tianshan Leopard, que milita en la Segunda División. El madrileño estaba a punto de empezar su segunda temporada como técnico del equipo de la ciudad de Urumchi (provincia de Xinjiang) y el pasado 6 de enero llegó con toda la plantilla a un centro de entrenamiento situado en Kunming (Yunnan) cuando emergió la epidemia del coronavirus que, desde entonces, les mantiene aislados.

Se encuentran en una base de entrenamiento a más de 3.500 de Urumchi, ¿cómo se quedaron aislados allí?

Estamos en Kunming, porque en la ciudad donde juega mi equipo ahora hay -14 o -15 grados, entonces venimos al sur a preparar la temporada. Esto es una base muy grande, de 14 campos y aquí vienen muchos equipos. Llegamos antes del año nuevo chino y había un montón de gente. Todos los chinos hans (etnia mayoritaria) se van a celebrar el año nuevo (25 de enero) porque es su fiesta. El problema es que mis jugadores al ser musulmanes (Uigures y kazakhs) no celebran el año nuevo chino y al final nos quedamos aquí. Entonces pasó todo lo del virus. Todos los demás equipos se fueron y nosotros nos quedamos solos en la base y no podemos salir. Estamos atrapados. 

¿Cómo se encuentran ustedes allí?

Aquí estamos bien. Es una base muy buena de entrenamiento y no tenemos ningún problema, lo que pasa que no podemos salir. Es un fastidio, pero es algo que no podemos controlar. El virus salta y ya está. 

¿Cómo reciben los suministros?

La base nos da de comer. Ellos compran la comida y tenemos de todo. Esto es una base enorme que tiene hoteles, residencias para los equipos y hay un comedor con su cocinero. Desayuno, comida y cena, tenemos todos los días. Y podemos salir a comprar fuera al Carrefour, que abre hasta las cinco. Pero solo puedes salir a comprar porque no hay nada más abierto, ni restaurantes, ni nada. De momento.

¿Se les exige alguna medida de protección o control?

Tienes que llevar la mascarilla cuando estás con más gente y luego lavarte las manos con alcohol o desinfectante. Nos toman la temperatura todas las mañanas y si tienes fiebre tienes que ir al hospital. Si no vas, te meten en la cárcel. Lo ha puesto así el Gobierno y tienes que cumplir. También se recomienda no ir a sitios donde haya mucha gente y quedarte en casa, que es lo que está haciendo todo el mundo. Hacer ejercicio en casa, comer en casa solo, no salir, que es un poco aburrido, pero es lo que toca hasta que remita el virus.

¿Se han dado pautas desde el  Gobierno para cambiar los hábitos alimentarios?

Todo parece ser que viene de un murciélago y de los animales salvajes, de un animal que se llama pangolín. Los chinos comercializan animales salvajes y se los comen. En Wuhan se cocinó un murciélago y por ahí viene todo. Se ha contaminado mucha gente y por eso Wuhan es el centro y ahí sí que está habiendo muchos problemas. Fuera de China sí que hay casos, pero es gente que ha estado en Wuhan y que luego ha ido a otras ciudades. Yo creo que ahora ya nadie come animales salvajes. Te dicen que tienes que comer fruta y verduras. Comer sano para intentar reforzar el sistema inmunológico. No hay más consignas. Aquí en la base no comemos nunca animales salvajes. 

¿Sus jugadores están en contacto con sus familias?

En contacto están, la telefonía funciona y todas las comunicaciones. No podíamos volver a Xinjiang. Es más alerta lo que hay fuera de China. Aquí sí que hay que tomar medidas pero con bastante normalidad. No es tan alarmante. Wuhan sí, porque es el centro y está muriendo mucha gente. Lo demás, normalidad. No veo a los jugadores preocupados.

Anteriormente, estaba en Guanzhou, en la Evergrande Football School & Soxna-Fundación Real Madrid, ¿ha podido hablar con sus excompañeros?

Coincidieron el año nuevo chino y como es una escuela de niños, los colegios están cerrados y no pueden volver al centro. Los entrenadores están todos en España, no pueden regresar hasta nuevo aviso.

¿Qué información dan las autoridades acerca de la epidemia? ¿Intentan que no se cree alarma?

Alarma hay. Todos los días informan de los casos que hay en cada provincia y al final tú tienes que tomar medidas. Es una epidemia. Hablan de que la otra SARS que tuvieron hace poco tiempo mató a mucha más gente. La comparan con la gripe española que mató más personas. Y esta no es muy mortal, para lo que son otras epidemias, pero sí es muy contagiosa. La gripe mata también a muchas personas si no tienes un sistema inmunológico fuerte. Si tú vas sin mascarilla y respiras el virus, te contagias. Por eso hay que tomar muchas medidas para evitar que se propague. Las muertes creo que van por dos mil y algo, según cuentan aquí. Aún no saben cuál es la vacuna.  

Mientras tanto, ustedes siguen en Kunming entrenando pero, el trabajo de su pretemporada no se puede realizar de forma normal.    

No es normal porque la liga empezaba ahora a finales de febrero y ahora se va a retrasar para principios de abril. Es como si empezásemos la pretemporada ahora. No hay equipos para jugar partidos. Nosotros, aquí, como está el filial, pues jugamos con ellos, pero no hay otros. Llevamos dos meses aquí e intentamos mantener la forma, hacer gimnasio y entrenamientos para que se mantengan, pero no podemos meter mucha carga porque no sabemos cuándo vamos a empezar. 

¿Hay alguna certeza de que la Liga empiece en abril?

Oficial no es. Parece ser que a lo mejor empezamos con estadios vacíos. Pero bueno, las ciudades fuera de  Wuhan están empezando a volver a la vida. Ya empieza la gente a ir a trabajar y a haber restaurantes y comercios abiertos. La gente, va con mascarilla pero la vida va empezando a funcionar poco a poco donde ya no hay casos de infectados. 

Colgó un vídeo en sus redes sociales pidiendo solidaridad con el pueblo chino, ¿fue iniciativa suya?

Nos lo pidió una televisión de aquí. Explico que hay que ser responsables, alimentarnos bien y cuidar de nosotros mismos para fortalecer el sistema inmunológico y frenar el avance del virus. Pero, sobre todo, pongo énfasis en que China no es el coronavirus, China y el pueblo chino están luchando contra el coronavirus y yo estoy convencido que con el apoyo de todo el mundo conseguiremos ganar esta batalla. Al final, mando un mensaje de ánimo: ¡Zhongguo, jiayou. Wuhan, jiayou. Xinjiang, jiayou! (Ánimo, China. Ánimo, Wuhan. Ánimo, Xinjiang!).