El Consorcio de Villalonquéjar ve ya con otra perspectiva el comportamiento del mercado. Si el primer año de la pandemia generó una gran incertidumbre, el optimismo ha regresado al ente tras haberse formalizado en el último mes varias operaciones de compraventa por valor de 2,8 millones de euros. A eso se suma la adjudicación a una firma checa, de nombre Accolade, de 62.000 metros cuadrados que tendrán como destino el uso logístico.

Según explica el vicealcalde, Vicente Marañón, se trata de una empresa intermediaria que compraría los activos para que sea otra la que se asiente en la capital burgalesa. El Consorcio ingresaría por esos terrenos 3,6 millones de euros. La identidad de la firma que se quiere implantar en Villalonquéjar IV se desconoce por motivos de confidencialidad. De momento, lo que hay es una adjudicación de las parcelas y Accolade tiene de plazo hasta el 28 de julio para hacer efectiva la compra y escriturar.

El empuje del sector logístico se consolida también con la adjudicación a otras dos empresas de 42.000 y 47.800 metros cuadrados en Villalonquéjar IV. La primera de ellas tiene previsto abonar 2,1 millones de euros por 4 parcelas ubicadas en las traseras de Campofrío Frescos y, al parecer, ya habría presentado el proyecto básico en el Ayuntamiento. Está previsto que escriture los terrenos antes del 31 de diciembre.

En el segundo de los casos, la reserva de suelo la ha realizado la empresa Hispavima (otra intermediaria), aunque en este caso ha solicitado una prórroga para formalizar la compra.  Tiene de margen para hacerlo hasta el 28 de febrero.

El Consorcio ha amortizado deuda por valor de 3,1 millones y le quedarían otros 1,9 para cumplir sus compromisos con los bancos en este 2021.