Un incendio declarado en un piso de la cuarta planta del número uno de la calle Conde de Guadalhorce -junto a la antigua estación- causó ayer gran temor en la vecindad debido al intenso humo que salía de sus ventanas. Sus moradores no se hallaban en ese momento en la casa, si bien cuatro mascotas que sí se hallaban en el interior -tres gatos y un perro- murieron en el siniestro.
El suceso se produjo sobre las 20 horas de ayer. Un vecino de un edificio aledaño se percató de que salía humo por una de las ventanas del edificio, por lo que dio aviso al servicio de emergencias 112 de Castilla y León, que movilizó a los bomberos de la capital. Lo cierto es que la misión para apagar las llamas no fue sencilla. Para empezar, fue imposible acometer el fuego desde la autoescala, ya que la presencia de varios plataneros frente a la fachada hizo imposible su despliegue. De modo que los efectivos del parque tuvieron que recurrir al plan B, algo más arriesgado.
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El incendio tuvo lugar en la calle Conde de Guadalhorce.
El suceso se produjo sobre las 20 horas.
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