El corredor colombiano del Ineos Iván Ramiro Sosa, vencedor, por tercer año consecutivo, de la etapa con final en las Lagunas de Neila, ha afirmado que conocía "muy bien la subida" y por eso sabía que "había que esperar hasta el final" para atacar a sus rivales.
"Estaba al límite pero como todos los otros corredores" ha añadido el colombiano, que tenía a su compañero de equipo Richard carapaz para "luchar hasta el final". Sosa se ha mostrado "muy contento por volver a hacer espectáculo" y aunque no ha podido "conseguir el tercer título".
El colombiano ha querido agradecer "a la federación colombiana por permitir viajar y competir en Europa" así como a la organización de la Vuelta a Burgos" por los protocolos y la organización que ha habido.