La exposición ‘Burgos, 1921: cuando la Catedral celebró sus 700 años’, que recrea en doce espacios cómo era la vida cotidiana de hace un siglo, cómo eran los lugares que frecuentaban los burgaleses o las infraestructuras de la ciudad, ha despertado curiosidad e interés entre los ciudadanos, como así lo confirman los datos de visitas de este primer mes de apertura.

Las siete instalaciones ya inauguradas (quedan por abrir los montajes expositivos del Museo de Burgos, el Arco de Santa María y el Teatro Principal) han recibido hasta la fecha 20.340 visitantes, siendo la instalación del monasterio de San Juan la que más público ha atraído, seguida del Consulado del Mar.

Como se recordará, en el monasterio de San Juan se ha recreado cómo era el mundo rural, el mercado de abastos de Santocildes y el transporte en 1921, mientras que el Consulado del Mar evoca la gran exposición de arte retrospectivo que acogió el Seminario de San José con motivo del 700 aniversario.

Otro céntrico punto que ha registrado una amplia asistencia de  público es Cultural Cordón, donde la Fundación VIII Centenario ha recreado ocho negocios de hace un siglo, con fondo escénico de la época, mediante la reproducción de texturas y superficies, papeles pintados y otros elementos decorativos, con suelos con diseños geométricos de pavimentos cerámicos o de madera. Las visitas guiadas a esta exposición están ya al 100% de su capacidad. Además, la Casa de Cultura de Gamonal está dedicada a las infraestructuras y cuenta con una maqueta ferroviaria de grandes dimensiones que recrea la confluencia del tren minero de Villafría a Monterrubio de la Demanda con el ferrocarril del Norte.
Estas exposiciones permanecerán abiertas hasta el 2 de mayo.