El tráfico de vehículos por el arco de San Martín quedará restringido a partir de mañana. El deterioro que sufre esta puerta, una de las entradas de la muralla de Burgos, ha motivado esta decisión por parte de las áreas de Patrimonio y Tráfico. Los recorridos se desviarán por las calles Francisco Salinas, paseo de los Cubos y Barrantes. Según explicó la concejala de Patrimonio, Sonia Rodríguez, la decisión cuenta con todos los informes correspondientes. En un principio se colocará un vallado provisional y señales de prohibido. "Somos conscientes de que los ciudadanos tendrán que dar un rodeo, pero es necesario preservar el monumento", señaló. 

Los expertos llevaban años, al menos desde 2004, advirtiendo del desgaste de este elemento, de estilo mudéjar. Ya entonces, la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural sugirió acometer una intervención urgente en el arco y cerrarlo al tráfico.

La portavoz del Grupo Municipal de Podemos, Marga Arroyo, ha sido la última en pedir que se pusiera coto al tráfico de vehículos por el arco de San Martín y hace poco más de un mes avisó al equipo de Gobierno de que su formación acudiría al Procurador del Común si no se tomaba esta medida. "El patrimonio no puede esperar", justificó entonces.

Ahora, se ha tomado la decisión de cortarlo al tráfico. En cuando a su restauración, se estará a las directrices del Plan Director de la Muralla elaborado recientemente.