La expectación generada por la nueva Ordenanza de Movilidad abarrotó el miércoles la Sala Polisón del Teatro Principal. La presencia de políticos del PSOE, Cs y Podemos (el PP y Vox declinaron la invitación) al debate organizado por seis colectivos del ámbito de la movilidad sostenible y del medio ambiente se convirtió en un llamamiento a que se rectifique la norma en lo que concierne a la prohibición de que las bicis puedan circular por la práctica totalidad de las calles del centro histórico y a que no tengan miedo a ser sancionados si utilizan con "prudencia" las aceras, y no la calzada, allí donde no hay carril bici.

El concejal de Movilidad, Josué Temiño, y el edil de Cs Miguel Balbás fueron los que más esfuerzos tuvieron que hacer pasa salir airosos ante los reproches de estos colectivos ante una nueva norma que les parece "pionera" en cuanto a la limitación de los 30 kilómetros por hora en las vías de un único carril o de un carril por sentido pero que, según lamentaron, "disuade en el uso de la bicicleta", supone "un retroceso" y "hace que estemos ahora peor que hace dos meses". Se puede hablar de un sentir generalizado ya que estas palabras fueron muy aplaudidas por los asistentes.

Temiño se zafó como pudo de estas reivindicaciones porque no es ningún secreto que el PSOE tuvo que tragarse el sapo de limitar a 9 las calles del centro por las que pueden circular la bicis. Un perímetro que obliga a los ciclistas a bajarse del ciclo cuando coches y furgonetas, según le recordaron, sí pueden transitar para, por ejemplo, realizar tareas de carga o descarga o aparcar junto a sus casas.

Políticos y representantes de colectivos minutos antes de arrancar el debate. - Foto: Valdivielso

La norma es un instrumento "vivo". El concejal de Movilidad, probablemente esperanzado en que en el futuro la norma pueda ser más generosa con los ciclistas, dejó caer que la Ordenanza es un instrumento "vivo". "No seremos soberbios y si hay que rectificar lo haremos", afirmó antes de reconocer que en ese aspecto "sabemos que no funciona" y al pedir a los presentes que "nos deis tiempo". Recordó que las Áreas de Tráfico Restringido se regulan mediante decreto, lo que facilita cualquier modificación, recordó que leyes de ámbito superior prohiben a las bicis circular por las aceras y ofreció a los colectivos que organizaron el debate (Andando Burgos, Burgos con Bici, Ecologistas en Acción, EnergÉtica Cooperativa, Fridays of Future y Greenpeace) crear un Consejo Sectorial de Movilidad en el que abordar este y otros asuntos.

Los aplausos se escucharon con fuerza tras la intervención de los simpatizantes de estos colectivos y el concejal de Cs se defendía de las críticas al afirmar que la postura que adoptó su partido de restringir el tráfico de bicis por el centro obedece a que se necesita proteger al peatón. Recordó que por este espacio de la ciudad pasean personas mayores, turistas y aseguró que los ciclistas solo tendrían que andar "5 minutos" para luego volver a subirse al ciclo.

La portavoz de Podemos en el Ayuntamiento, Margarita Arroyo, tildó de "jaula" el perímetro impuesto por Cs y afirmó que "no tiene ningún sentido" que los ciclistas se tengan que bajar de la bici y no tengan itinerarios para circular por el centro. Pese a ello, defendió que votaron a favor de la Ordenanza por "responsabilidad" y por los avances en otros ámbitos.