El documento está ya en manos de los grupos municipales y pone de manifiesto que el Samyt dejaría de percibir unos 600.000 euros con la implantación de la bonificación (el PP cuando presentó la iniciativa estimó la cantidad en 275.000).
En la actualidad los jubilados, mayores de 60 años y discapacitados tienen una tarifa de 0,12 euros el viaje. Con estos requisitos hay 12.496 tarjetas, de las que 10.366 son de mayores de 65 años, es decir el 82,95%. Según el informe, asociados a estas tarjetas a fecha del 30 de septiembre se han realizado viajes por valor de 231.210 euros y en base a ello se estiman unos ingresos de 308.300 euros anuales, a ellos se añadirían otros 212.910 euros del 5,8% que usa el bonobús y 8.040 euros los que pagan billete ordinario. De modo que se dejarían de ingresar 529.250 euros.
A esta cifra habría que añadir 80.000 euros, que no se ingresarían por el coste de las nuevas tarjetas que serían gratuitas (2 euros).
El concejal del PP en el Samyt, Jorge Berzosa, asegura que el informe está lleno de errores, que pide que se subsanen. "Todas las tarjetas reducidas sumaron 190.000 euros en 2018 y si el 83% son de jubilados serían 158.000 euros. No sabemos de dónde han sacado esos datos porque supondría la realización de 2.569.000 viajes, 800.000 más que los registrados por este sector de población en 2018".
Tampoco está de acuerdo en que suponga un gasto el coste de las tarjetas a los mayores de 65 año si se les da ahora y luego hay que cambiarlas al implantarse la nueva. En este sentido, recuerda que ya están adquiridas las nuevas y, por lo tanto, podrían utilizarse ya. Sin embargo, al parecer la nuevas no se entregarán hasta febrero de 2020.
Por su parte, el concejal del Samyt, Josué Temiño, indicó que el coste de implantar la gratuidad es "elevado", según el informe.
paradas. Por otro lado, el consejo del Samyt aprobó el plan de seguridad y salud para la remodelación de 16 paradas de autobús de cara a la implantación de la nueva red de líneas y las obras podrán comenzar en las próximas semanas. Peor suerte corrió el inicio del expediente para otras 10 paradas. El PP, Cs y Vox votaron en contra. Berzosa se mostró contrario a la solución dada a dos de ellas (la ubicada frente al Mercadona de Cellophane y la situada frente al Lidl del G-3).