Recursos "extraordinarios" para reducir las listas de espera

GADEA G. GUTIÉRREZ
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El HUBU en 2019 ganó 1.627 pacientes pendientes de entrar en quirófano y cerró con 4.522 con fecha y hora de operación. Es el segundo máximo tras el traslado. La demora se duplica: 137 días

El HUBU trabaja con entre 17 y 21 quirófanos. - Foto: Valdivielso

El HUBU cerró el 2019 con el segundo peor dato de lista de espera quirúrgica desde el traslado a la avenida Islas Baleares, al ganar 1.627 pacientes en un año y alcanzar los 4.522 con fecha y hora de operación, pero pendientes de entrar en quirófano. Con estas cifras sobre la mesa, la dirección del complejo y Sacyl están estudiando cuánto más hay que operar al cabo del año para tener una «lista de espera de dimensión aceptable», según palabras del gerente del hospital, José María Romo. Y dado que es previsible que ese volumen no se pueda alcanzar con medios propios, Romo no oculta que, llegado el caso se planteará hacerlo con «recursos extraordinarios». Es decir, pagando para externalizar procesos o hacer «autoconcierto» (en esta opción entran las peonadas).

José María Romo sucedió a Miguel Ángel Ortiz al frente del complejo asistencial de la capital a finales de septiembre, por lo que es responsable de los datos del último trimestre, que son los que la Consejería de Sanidad hizo públicos ayer. Así, señaló que entre abril y su toma de posesión -el 25 de septiembre- el HUBU realizó 1.360 operaciones menos que el año anterior; un descenso que continuó en la recta final del año con otras 200 cirugías menos realizadas. «El problema es que se arrastra pérdida de actividad», dijo, admitiendo que los datos son malos y que hay que buscar soluciones.

La primera pasa por completar la plantilla de anestesistas, que está muy por debajo de los 37 que debería tener el centro por plantilla orgánica. «El hospital ha perdido actividad en 2019 porque ha carecido de siete anestesistas durante un montón de tiempo», dijo, destacando que en octubre se contrató a dos efectivos y que ahora hay un déficit de cinco. Pero hay que tener en cuenta que, por el tamaño y por el área de influencia del HUBU, Sacyl autorizó que este servicio contratara a más profesionales de los permitidos sobre el papel, por lo que en 2018 llegó a trabajar con más de 40 efectivos. Y ahora, a pesar de los dos nuevos contratos, siguen siendo menos.

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