Llevar la cultura al medio rural y que los vecinos participen en los espectáculos es el objetivo que persigue el circuito rural proyecto Senda, que ayer comenzó en Rubena, segunda de la tres paradas previstas por la Asociación Nacional de Artistas de Calle (Patea) en esta edición, tras Forcall (Castellón) y a la espera de viajar a Catoira (Pontevedra). La programación, que comenzó ayer con un taller de máscaras en el que participaron más de medio centenar de niños, se prolongará hasta el domingo con actuaciones a cargo de cuatro afamadas compañías.

Integrantes de la compañía gallega Troula, que actuará esta tarde con un espectáculo de máscaras gigantes y articuladas, música y fuegos artificiales, fueron los encargados de dirigir a los niños en la confección de unas máscaras que lucirán esta tarde en la actuación de calle, convirtiéndose también en protagonistas del espectáculo.

«Con este proyecto se trata de integrar, no de llegar al pueblo hacer el bolo, hacer una actuación, sino de integrar las artes de calle en el pueblo y una forma de lograrlo es con este taller de máscaras con los niños de Rubena para que hoy nos acompañen durante el espectáculo de calle», manifiesta Diego Roca, unos de los miembros de Troula, grupo que lleva veinte años ofreciendo actuaciones de calle y que en su último espectáculo, adaptado para este proyecto, incluye este taller de máscaras.

«La máscara es muy importante en el teatro de calle porque las primeras compañías de teatro de calle, las italianas de comedia del arte, utilizaban la máscara de cuero», asegura Roca, uno de los seis integrantes de Troula, grupo que tiene en los espectáculos de calle su fuerte, que recuerda que llevan dos años intentando poner en marcha este proyecto Senda, «que esperamos consolidar para que tenga continuidad en el tiempo», asevera, a la vez que da instrucciones a un niño para colocar unas cejas en la máscara que esta realizando.

Llegar al medio rural no es fácil, pero Patea apuesta por llevar a pequeñas localidades como Rubena las artes de calle «porque tienen difícil acceder a la cultura», afirma Roca, quien recuerda que en este encuentro la anfitriona es la compañía burgalesa Tiritirantes, que es miembro de Patea. «Cada compañía actúa en una comunidad diferente a la suya para darse a conocer y que todo fluya mucho más culturalmente», declara Roca, que se mostró «alucinado porque en un pueblo de 150 o 200 habitantes nos hemos encontrado con más de 50 niños y nos estamos quedando sin material.La respuesta ha sido increíble, magnífica».

Para esta tarde y mañana. La programación continúa hoy, a partir de las 19.30 horas, con el espectáculo Pachamama, de la compañía gallega Troula, un número itinerante mucho fuego, marionetas gigantes, «son títeres gigantes que se llevan a la espalda», matiza Roca, además de música tribal y electrónica, y pirotecnia. 

Mañana sábado se desarrollarán los actos centrales del programa, comenzando a las 13 horas con la actuación del Circo la Raspa, que presentará su espectáculo Freax Show, el único estático de todos los programados. Fadunito, de Cataluña, en dos pases, a las 15.30 y a las 17 horas, presentará La Gran Familia, un trabajo que ya he llevado por toda Europa y Latinoamérica, lleno de improvisaciones y protagonizado por dos hermanos y un bebé de tres metros de altura. 

En último lugar actuará la compañía vasca Deabru Beltzak, que presentará Les Tambours de Feu a las 18.30 horas, con percusión y muchas llamas. Para cerrar las actuaciones, a las 22.30, los profesionales de todas las compañías mantendrán un encuentro para hablar de artes escénicas y medio rural.