El Ayuntamiento de Santa Gadea del Cid mantiene una apuesta por el turismo. El potencial patrimonial que esconde el pueblo cuenta con alicientes suficientes, aunque todavía quieren más. Así lo explica su alcalde, Jorge Ortiz, quien admite que «ya que estamos poniendo el pueblo bonito, vamos a intentar promocionarlo». Para alcanzar el reto apuestan por una oficina de turismo, que sirva de polo de atracción y que visibilice los tesoros que esconde su entorno cercano. Para este objetivo, han estimado una inversión de 120.000 euros.

El objetivo pasa por levantar un nuevo edificio que albergue este espacio, que se quiere empezar a construir este año, con la vista puesta en su inauguración en 2022. Se ubicará junto al Ayuntamiento y para financiarlo «aprovecharemos los fondos de Enresa a varios años y que ya nos han concedido, aunque estamos pendientes del dinero final que nos van a dar». Para completar la financiación «optaremos a planes provinciales con los que podremos conseguir unos 70.000 euros», agrega Ortiz, por lo que entre las dos entidades esperan alcanzar los 100.000. El coste total supera esta cifra, pero la intención pasa por llegar o superar la cantidad con la que parte el proyecto.

El municipio ha entrado dentro de la Red de Pueblos Mágicos de España en este 2020, por lo que si la promoción surte efecto, la oficina canalizaría el interés que se cree por el municipio, cuyo casco histórico fue declarado como Bien de Interés Cultural en 1973.

También cuenta con este reconocimiento su castillo, que en este 2021 se consolidará. Ortiz ensalza la importancia de los 126.000 euros que ha concedido la Junta para asegurar la muralla norte de la fortaleza. La seguridad de los vecinos y conservar el patrimonio son los dos objetivos para esta nueva actuación en el castillo, con lo que se afianzarán todos los restos.

La petición a la Junta alcanzaba los 150.000 euros, aunque con la cantidad concedida servirá para los trabajos que se tienen previstos. En primer lugar, se restaurará parte de la muralla para evitar que haya desprendimientos, aunque también se harán trabajos de desbroce y una buena parte de la partida asignada servirá para reducir las filtraciones de agua. Para eso se instalará «una red de drenajes», como ya se hizo en una primera actuación en otra parte de la muralla, donde se invirtieron otros 100.000 euros en 2017.

«Estamos ya manos a la obra para empezar con la licitación», admite Ortiz, quien advierte que ahora se tienen que cerrar todos los detalles del proyecto con Patrimonio para acometer la obra, porque la Junta «marcará cómo hay que hacer la consolidación para no dañar nada».

Plan director. Con los últimos pasos para consolidar los restos del castillo, el municipio ya piensa en las siguientes actuaciones. Para desarrollar una idea, quieren que las inversiones respondan a una estrategia y para eso van a establecer un plan director. Con él «crearemos una hoja de ruta, aunque sería interesante meter mano a la torre del homenaje, que está consolidada pero sí que tiene alguna fisura», avanza Ortiz sobre los planes municipales.

El pan se uniría al estudio arqueológico que se pretende elaborar para conocer realmente qué potencial tiene el castillo, porque cuando se realizó la primera fase de la consolidación en el 2017, se vieron estructuras anteriores al siglo XV.De esa época data la reconstrucción que se ve ahora, que se hizo sobre una edificación anterior puesto que el origen de la fortaleza se remonta al siglo XI.