Impiden desarrollar el plan de la zona BIC de Sasamón

F.T.
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El alcalde afirma que el PECH es necesario para poder solicitar un programa de regeneración urbana y acometer con ayudas la rehabilitación de viviendas y fachadas o pavimentaciones

Las casas señoriales y palacetes salpican el entramado urbano del casco histórico de la villa. - Foto: Alberto Rodrigo

La reciente declaración de Sasamón como Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de Conjunto Histórico, resolución que llega tras 38 años de espera, ha puesto de manifiesto la necesidad de intervenir es el conjunto histórico de la villa y poner en marcha los mecanismos necesarios para conservar, rehabilitar y poner en valor el legado romano de la vieja Segisama, que convive con un no menos importante patrimonio medieval y renacentista que salpica las calles y plazas de esta singular villa. Este es el objetivo del equipo de gobierno municipal, aunque para llevarlo a cabo, apunta el alcalde, Amando Calzado, «falta voluntad política».

«Necesitamos redactar un plan especial del casco histórico (PECH)  para poder solicitar a la Junta un área de regeneración urbana (ARU), con el fin de recibir ayudas  para que los vecinos puedan rehabilitar casas y fachadas, y urbanizar calles y espacios públicos, pero nos encontramos con el rechazo de la oposición», afirma el regidor, quien afirmar que la oposición municipal (Ciudadanos) «está en plan  destructor y no tiene voluntad política para sacar adelante estos proyectos, no miran por el bien del pueblo», asegura. Calzada recuerda que ya existe un acuerdo municipal para redactar el PECH, «pero no podemos licitar la redacción del mismo porque se oponen y no lo podemos aprobar, lo mismo que se han opuesto a que el Ayuntamiento ofrezca un servicio de transporte a la demanda, contratando un taxi, para que los vecinos de la juntas vecinales puedan venir cuando lo necesiten a Sasamón a realizar sus compras aquí y no en Burgos».

El alcalde insiste en que la reciente declaración de BIC «es una oportunidad que tenemos que aprovechar, para solicitar un área de regeneración urbana (ARU), como en su día hicieron Castrojeriz o Melgar, para arreglar las casas, ya que los vecinos pueden obtener ayudas de hasta el 60 o 70 por ciento porque cuesta mucho dinero una intervención como esa y no se puede hacer si no es con subvenciones», afirma, a la vez que matiza que esos estímulos económicos «animarían a los propietarios para mejorar sus viviendas».

Además, Calzada recuerda que disponer de un PECH  también supondría agilizar la autorización de los permisos de obras «porque con ese plan especial nos evitaríamos tener que enviar todos los proyectos urbanísticos a la comisión de Patrimonio para su autorización», matiza el alcalde.  A pesar de esta ventajas, Calzada lamenta que la oposición «esté condenando al pueblo» y asevera que al equipo de gobierno «lo que le sobran son planes, tenemos muchos,  pero falta voluntad política de Cs».