Los pacientes del Santos Reyes, más cerca de su familia

ADRIÁN DEL CAMPO
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El hospital comarcal establece que los profesionales de fisioterapia actúen como enlace entre los enfermos y sus allegados. Una persona podrá acompañar a los infectados críticos

Equipo completo del ecógrafo portátil recibido. - Foto: DB

Avisar a todos los familiares antes del fallecimiento de un enfermo con coronavirus, permitir que los pacientes tengan objetos personales, dar la televisión en abierto, aunque esto espera materializarse el lunes; que un familiar pueda acompañar al ingresado cuyo fallecimiento esté próximo y que los profesionales de fisioterapia actúen como enlace entre enfermos y allegados con el objetivo de trasladar audios, dibujos, mensajes, poesías.... Esas son las medidas que ha adoptado el hospital de Aranda de Duero para intentar reducir la distancia entre personas hospitalizadas por COVID-19 y sus familiares. 

En el Santos Reyes reconocen que lo más complicado es que un familiar pueda entrar a ver al paciente en sus últimas horas porque eso supone consumir un equipo de protección individual (EPI), pero a la vez reconocen la importancia de humanizar la situación. Por ello, será una única persona la que pueda acceder a ver al enfermo y siempre a partir de las 14.00 horas para no interferir en los trabajos de los profesionales sanitarios. "Creo que con todo esto suavizamos en la medida de lo posible las condiciones durísimas de aislamiento de los pacientes ingresados", declaran en la dirección del hospital, desde donde quieren destacar el papel de la trabajadora social, que es quien ha coordinado todo el plan de humanización en el centro.

Estas no son las únicas novedades que hay en el complejo sanitario. El Santos Reyes de Aranda de Duero recibió ayer nuevo equipamiento para agilizar sus labores frente al coronavirus. Se trata de un nuevo aparato de rayos x que estará operativo el lunes después de que durante este fin de semana se realicen las mediciones, se instale el software... El sistema está valorado en unos 75.000 euros y se quedará de forma definitiva en el hospital comarcal una vez se supere el estado de alarma. A este material hay que sumar un nuevo ecógrafo portátil que ya está en el complejo sanitario.

Los refuerzos para el Santos Reyes también han llegado en forma de donaciones. Ayer mismo Ikea enviaba al hospital 310 dispensadores de gel y jabón y cien mesillas. Los envases para soluciones hidroalcohólicas era y es otra de las necesidades del hospital que ya se estaba paliando gracias a las donaciones de ciudadanos que incluso desbordaron la capacidad de recogida de Protección Civil, por lo que se han habilitado distintos puntos de entrega en supermercados de Aranda de Duero.

Respecto al número de contagios confirmados e ingresos en la capital ribereña, este sigue arrojando datos positivos y en la mañana de ayer eran 37 los ingresados en el Santos Reyes, mientras seis permanecían en estudio. A estos datos hay que sumar un nuevo fallecimiento sufrido ayer por coronavirus y que eleva el total de muertes en Aranda a 20. Las altas también continúan aumentando y ayer se registraron cuatro más. Ya son 36 los pacientes que han superado el coronavirus en el hospital. A pesar de que las cifras dibujen una reducción en las infecciones, hay que seguir extremando las precauciones y cumpliendo las directrices porque la situación puede cambiar de un momento a otro.