Las 'Alas de México' de Jorge Marín posan 6 meses en Burgos

DB
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La escultura del artista mexicano que invita a interactuar con ella estará en la plaza de Santa María desde el día 26 para celebrar el VIII Centenario de la Seo. Habrá actividades paralelas

Hasta el lunes a primera hora, la obra permanecerá junto a la Puerta de Bisagra, en Toledo (en la imagen). De ahí viaja a Burgos. - Foto: La Tribuna de Toledo

Preparen las cámaras de fotos o los móviles y busquen la mejor pose para echar a volar frente a la Catedral. Siéntase un ave Fénix, un Ícaro dispuesto a escapar por el aire o en un ángel de libertad. La monumental escultura de Jorge Marín Alas de México, que allá donde va incita a interactuar con la obra retratándose con las plumas doradas a la espalda, va a estar seis meses en Burgos, en la plaza de Santa María, para celebrar el VIIICentenario de la Catedral con el apoyo de la Galería Rodrigo Juarranz.

Tras un esfuerzo conjunto entre la Fundación Jorge Marín y el Ayuntamiento de Burgos, la obra del artista mexicano  promoverá la interacción de las personas con el arte contemporáneo en el espacio público de esta ciudad, donde la tradición y la modernidad se encontrarán para dialogar con la sociedad burgalesa.

Del 26 de agosto al 30 de marzo del año que viene, la pieza de bronce de 4,5 metros de alto y 1,836 kilos que Marín concibió en 2010 con carácter lúdico, invita a la ciudadanía a vivir una experiencia que va más allá de lo estético. Mediante el contacto con la instalación, el visitante podrá complementar el significado que la obra posee y, así, hacerla suya.

A lo largo de más de una década, esta instalación ha recorrido 35 países de cuatro continentes y se encuentra de forma permanente en 14 ciudades del mundo. Burgos será la segunda sede temporal de Europa en acogerla, después de permanecer durante diez meses en Toledo(la escultura abandona la ciudad castellano manchega a primera hora del lunes).

La representación de las alas ha sido una constante en el trabajo de Jorge Marín. Las podemos encontrar a lo largo de su producción artística; por ejemplo, en sus esculturas de seres alados, así como en otras obras instaladas en el espacio público. Para el propio creador «las alas, en cualquiera de sus posiciones, ya sean extendidas, en reposo o en movimiento, invitan a los seres humanos, desde un lenguaje universal, a superar sus propios límites, ya sean reales o imaginarios».

La Fundación Jorge Marín, encargada de difundir en todo el mundo la obra del escultor mexicano –a través de proyectos artísticos y de índole social— se ha propuesto trabajar con la sociedad burgalesa: «Proponemos un escenario para el encuentro, una invitación al movimiento y a la libertad», apunta Elena Catalán, directora de la Fundación Jorge Marín.

La instalación estará acompañada de actividades paralelas como talleres infantiles, concursos y charlas, encaminados a propiciar la participación social de la niñez, la juventud y de las personas en situación vulnerable.

Presentar Alas de México en Burgos tiene un significado especial para el arte contemporáneo mexicano; a través de esta exhibición, México profundizará su vínculo cultural con la ciudad, enclave que sigue creciendo en pleno siglo XXI gracias a su ubicación estratégica y a la rica herencia de su Patrimonio.