Los datos de contagios de la sexta ola comienzan a presentar un escenario esperanzador tras alcanzarse el pico de casos, tal y como ha anunciado este jueves el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez. En las últimas horas, en la provincia de Burgos se han notificado 997 nuevos infectados, una cifra sustancialmente inferior a la del miércoles, cuando se registraron 1.509. El dato negativo llega un día más por el lado de los fallecimientos, ya que ha habido que lamentar dos nuevas muertes por el virus del SARS-CoV-2, lo que eleva el número de víctimas a 852 desde que comenzara la pandemia. En la última jornada, por otro lado, se han dado 25 altas hospitalarias a personas que han superado la infección.

En cuanto a los brotes activos se mantienen los 37 de la jornada anterior con 514 casos vinculados a ellos.

La incidencia acumulada ha descendido de manera significativa, pasando de 5.600 a 5.203 casos a 14 días por cada 100.000 habitantes. En la capital ha caído a 5.836 frente a los 6.236 del miércoles.