Los vecinos de la localidad ribereña de Haza contuvieron la respiración mientras los bomberos de Aranda luchaban contra el incendio que se desató en torno a las 16 horas de la tarde de este martes. Al parecer, la cercanía de la línea del tendido eléctrico pudo ser la causa de este incendio fortuito que, avivado por las rachas de viento que se registraban en la comarca, costó controlarlo y extinguirlo más de tres horas.
Las llamas, que afectaron principalmente a la maleza de la zona sur de la ladera sobre la que se sustenta Haza, se quedaron muy cerca de las viviendas de esa vertiente, haciendo que sus propietarios pasasen unos momentos de tensión hasta que vieron que los bomberos impedían los daños materiales en sus viviendas.