Las obras de Anduva, en el aire por el coronavirus

Ó.C.
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El Mirandés iba a acometer este verano mejoras en el campo por un valor de 1,5 millones de euros. Para ello ha tratado de implicar a las administraciones, pero los cambios por el Covid-19 complican las inversiones

Las obras de Anduva, en el aire por el coronavirus

El Mirandés ya tenía el verano ocupado antes de que el coronavirus cambiara el calendario. En los meses sin actividad, la entidad tenía previsto acometer importantes obras en Anduva para cumplir en parte con las exigencias de la Liga de Fútbol Profesional, aunque ahora están en el aire y con la firme sospecha de que no se realizarán. El escenario es difícil que cambie a no ser que por ejemplo se suspenda la temporada, algo que es poco probable.

El punto principal en el que se iba a actuar era la iluminación, requisito fijado por la patronal para que los rojillos pudieran competir en Segunda. Para esto se pensaba destinar alrededor de un millón de euros, aunque era el único punto de inversión que se tenía en al agenda.Otro de los aspectos que también se querían mejorar era el césped. Al contrario que sucede con la iluminación no era una obligación, sino que la entidad rojilla quería contar con un nuevo tapete, puesto que el que hay en estos momentos hace mucho tiempo que no se renueva y el sistema de drenaje no funciona como antes. Para este objetivo se había previsto invertir medio millón.

En total la intención era gastar 1,5 millones de euros, aunque ahora esto queda en el aire, incluso es complicado, puesto que la intención de la LFP y de la Federación es retomar la competición y prolongarla más allá del 30 de junio, por lo que el calendario se apretaría y se duda que dé tiempo para terminar las obras antes de que empezara el próximo curso, que por otra parte también se desconoce cuando se arrancará.

El Mirandés guarda oficialmente silencio, aunque sí que se indica que en este tiempo ninguno de los responsables de la Liga se ha puesto en contacto con ellos para hacer ninguna valoración. Se entiende que en estos momentos se tienen problemas mucho más importantes, con la idea de retomar la actividad, aunque oficialmente no hay nada.De esta manera ahora no se va a preguntar sobre este asunto, pero dada la situación la moratoria para competir una temporada más con el mismo sistema de iluminación parece lo más probable, sobre todo cuando en la entidad rojilla existía el compromiso real de hacer estas mejoras en el viejo Anduva.

Para ello se había contactado con las administraciones públicas, puesto que se entendía que la entidad lo necesitaba para poder competir en Segunda. En la ultima Junta General de accionistas el presidente y máximo accionista, Alfredo de Miguel, dejó claro que el Mirandés tenía pendiente obras importantes por delante y "solo no las puede acometer".

De Miguel dijo en aquella cita que en "los últimos cinco a seis años" la entidad se ha gastado en mejoras 3,8 millones de euros, en un estadio que tiene muchas carencias para cumplir con todos los requisitos que se piden por parte de los responsables del fútbol profesional en España. Por todo esto se pidió que el Ayuntamiento se implicara, puesto que el campo está cedido al Mirandés pero es municipal. La respuesta fue crear "un grupo de trabajo" para valorar las necesidades.

Aprovechando la semifinal de Copa y la presencia del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, se intentó implicar a la administración regional e incluso se ha tenido al menos una reunión antes del estado de alarma. Esto ha hecho que la situación se paralice, por lo que seguramente será otro de los argumentos que jueguen en contra de continuar con el plan de las obras previstas en Anduva.

 

ÚLTIMAS MEJORAS 

El último verano el Mirandés también se vio en una situación contra reloj, puesto que fue uno de los últimos equipos en subir, por lo que se tuvo menos margen de maniobra. Aún así y aunque había otras deficiencias dentro del exigente reglamento, la entidad tuvo que implantar el sistema para el videoarbitraje o ampliar el número de cabinas de prensa. Además se cambiaron todos los asientos de Tribuna y se homogeneizó la imagen de la publicidad.