La rápida actuación del Ayuntamiento medinés, que el domingo fletó sendos autobuses con una empresa local, ante el "abandono de los usuarios que habitualmente utilizaban esta línea los domingos para volver a las capitales burgalesa y vizcaína" ha servido para que Alsa reaccione y se comprometa con el alcalde, Isaac Angulo, a que "el próximo domingo por la tarde dará servicio a Burgos y Bilbao". Asimismo, el regidor medinés confía en que la compañía decida en los próximos días un cambio de horarios para los viernes por la tarde, que retrase la salida de las ciudades y de tiempo suficiente a los estudiantes para coger el autobús, algo imposible con los horarios implantados el día 7.
Con ellos, la concesionaria de la línea Burgos-Bilbao dejaba a la comarca incomunicada durante todo el fin de semana, al fletar los últimos autobuses de Burgos y Bilbao en dirección a la comarca a las 14.00 y 13.30 horas, respectivamente, y suprimir todos los del sábado y domingo, dejando sin servicio a todos aquellos que quisieran volver a sus lugares de estudio o domicilios el domingo por la tarde.
Las gestiones de Angulo comenzaron de inmediato. El viernes mantuvo una conversación telefónica con el subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente, al tratarse de una concesión que discurre entre dos autonomías y depender del Gobierno central, y esa misma mañana, el alcalde de Villarcayo, Adrián Serna, mantuvo un encuentro con el subdelegado con ese mismo asunto sobre la mesa. Ambos terminaron la jornada sin soluciones, mientras Alsa señalaba a DB que "el número de viajeros en esta línea sigue estando un 70% por debajo respecto a las mismas fechas que el año anterior, por lo que, con la autorización del Ministerio de Transportes, hemos ajustado las expediciones a este fortísimo descenso de la movilidad".
Movilizaciones. Con las redes sociales incendiadas, el anuncio de una movilización ciudadana prevista en Villarcayo el próximo domingo, a la una de la tarde, que pretende crear una cadena humana desde la plaza Mayor hasta la estación de autobuses, y casi 1.500 firmas en la plataforma Change.org, el equipo de gobierno medinés quiso demostrar a Alsa que si hay demanda y testar el número de viajeros. Anunció el ‘autobús municipal’ a las dos de la tarde del sábado y, a pesar la escasa antelación, 30 personas, en su mayoría usuarios que iban a Bilbao, viajaron el domingo. El Ayuntamiento medinés, que abrió este servicio a cualquier vecino de la comarca que acudiera a la estación medinesa, anunciaba ayer que lo mantendría hasta que Alsa de soluciones, pero parece que llegarán pronto. Angulo estuvo ayer en contacto con la compañía y volverá a conversar con el subdelegado del gobierno en busca de una solución "a un problema que preocupa y deja tirada a mucha gente".
El alcalde villarcayés también mostraba su indignación el viernes y señalaba que Alsa se basaba en datos de viajeros que no se ajustaban a la realidad, dado que iba a llegar el comienzo de curso tras seis meses sin clases presenciales. Asimismo, lamentaba el daño económico, al obstaculizar la llegada de visitantes de fin de semana.