José María Vicente

El Rincón de...

José María Vicente


Soria, Teruel y Cuenca

07/07/2020

Buscando inspiración para estas líneas me encuentro con la noticia de que los presidentes de Castilla La-Mancha, Castilla y León y Aragón se han reunido para afrontar problemas comunes. Espero que no se trate simplemente de tacticismo político de los dos principales partidos de este país para taponar la fuga de votos hacia opciones más localistas como la que ha sentado a un diputado en las Cortes por Teruel existe. Me parece constructivo que tres amplios territorios de España debatan sobre sus problemas comunes y no sobre las barreras levantadas artificialmente aduciendo supuestas identidades diferentes.

El asunto está en que una parte importante de la España vaciada concierne a nuestras regiones y que las políticas llevadas a cabo hasta ahora no han sido eficaces para encontrar la solución. Soria, Teruel y Cuenca son ejemplos palpables del destrozo ocasionado por décadas de políticas que buscaban la emigración de esa población rural marcada por la falta de recursos en sus pueblos y fascinada por la promesa de una vida mejor en las grandes ciudades.

Parece que el fondo de la cuestión está en clonar alguna experiencia piloto habida en los países nórdicos en los que también hay zonas muy despobladas. Se trata de discriminar en positivo la vida en los pueblos bajando considerablemente las cotizaciones sociales a las empresas y trabajadores de esas zonas, medidas de carácter fiscal que compensen la falta de otros recursos, infraestructuras físicas y no físicas que permitan el desarrollo de actividades económicas en igualdad de condiciones de las zonas urbanas. Ahora hay que convencer al Gobierno para que lo plantee en la UE y eso nunca es tarea fácil.

Quiero ser bien pensante y que los reunidos estén verdaderamente interesados en dar un empujón para que la vida en Soria, Teruel y Cuenca resulte más fácil para sus habitantes. Hay que crear las condiciones para que otros pongan el foco en esos entornos rurales privilegiados por la naturaleza pero muy hostiles para el sostenimiento de la actividad económica. Si las administraciones generan las condiciones estoy seguro de que la creatividad y el emprendimiento de los españoles hará el resto. Lo acabamos de ver en la pandemia cómo han surgidos cientos de iniciativas interesantes de las que la inmensa mayoría de nosotros ni siquiera sabíamos que pudieran existir.