La Asociación Burgalesa de Empresarios de Agencias de Viajes ha remitido un escrito al Consorcio para la Promoción de Villafría, cuya asamblea y directiva se reúnen hoy, en el que, «como sector estratégico en la comercialización del aeropuerto», dicen un «no a la oferta de Ryanair», que ha propuesto conectar Villafría con Barcelona y Londres a cambio de un millón al año, una de las cuestiones cruciales que se debatirán esta mañana.
Así, explican que «antes de tomar decisiones» de futuro «hay que cerrar el capítulo de León Air y que tanto viajeros como agencias recuperen su dinero». Además, creen que la oferta «no cubre ni por asomo las necesidades» de Burgos, señalando que operativas especiales como las de los puentes o la de verano «damos por hecho que ya no existirían» si se aceptara el acuerdo con el gigante del bajo coste.
También desconfían de la aerolínea irlandesa, de la que aseguran que «hay suficientes ejemplos en otros aeropuertos de España» de que abandonaría Villafría «si mañana lo desea» por cualquiera que fuere su motivación. Recuerdan en el escrito que en campañas anteriores las compañías debían ajustarse a un presupuesto máximo de 300.000 euros y, además de ofrecer cinco vuelos semanales a Barcelona, debían comprometerse a establecer chárters de verano con destino a las islas y costas españolas.
Por esos motivos, terminan pidiendo ser escuchados y defendiendo que «Burgos debe apostar por una infraestructura de gran valor para la ciudad como es el aeropuerto», pero creen que «hay que hacer antes una reflexión sobre lo que necesitamos y no dejarnos llevar por cantos de sirenas».
Y el PSOE...
Tampoco al Grupo Municipal Socialista le satisface la propuesta de Ryanair, que consideran un «chantaje» al estar supeditada a una toma de decisiones casi inmediata (10 días) a pesar de que la aerolínea no empezaría a volar desde Villafría hasta septiembre del próximo año.
Lo que sí defendió de forma clara su portavoz, Daniel de la Rosa, es que se haga una fuerte apuesta económica, que cifró en un millón de euros e incluso más, por mantener vuelos en la terminal burgalesa. «El aeropuerto lo construyó y lo mantiene Aena. Es una infraestructura que a la ciudad le sale gratis y dependemos de ella para mejorar nuestro nudo logístico: un aeropuerto sin vuelos no ayuda, así que en esto no puede haber medias tintas», valoró.
Coincide De la Rosa con el PP en vaticinar el cierre definitivo de las instalaciones si Aena se encuentra con un aeropuerto sin aviones comerciales, y por eso cree que «la única respuesta responsable pasa por comprometer una cantidad importante o nuestro aeropuerto cerrará».
Lo que sí adelantó que exigirá hoy (al igual que David Jurado, también vocal en el Consorcio) es que eso se haga a través de un concurso público que garantice la libre concurrencia (también de Ryanair en igualdad de condiciones con el resto), recupere la línea regular con Barcelona y cinco vuelos semanales, opere una conexión estival con las islas y permita añadir otros destinos.