Poco ha durado el impoluto muro que se levantó en el conocido Callejón de las Brujas (bautizada oficialmente como calle Embajadores) dentro de las obras (aún inconclusas) para recuperar este emblemático, desmejorado e infrautilizado rincón del centro histórico de la ciudad. Los grafiteros no han dejado pasar la oportunidad de dejar su sello, pero la idea del Ayuntamiento es que en la pared que se ha construido para separar este vial de las parcelas colindantes luzca un mural en el que se recree el aspecto original de este espacio en tiempos del Cid Campeador.

La propuesta ha sido trasladada por la asociación de vecinos del Casco Histórico Alto y se ha recibido de buen agrado por el concejal de Licencias, Julio Rodríguez-Vigil, que lo trasladará a los máximos responsables del Ejecutivo local para que se incluya una partida de unos 6.000 euros en el Presupuesto.

La iniciativa contempla la recreación de la calle Embajadores reproduciendo en un dibujo elementos arquitectónicos como arcos, muro, calzada, casa y otros de ámbito cultural o costumbristas como artesanos, músicos, gente del medievo o el propio Cid Campeador. «Se quiere ser lo más fiel posible a la época, con un trabajo respaldado con un profundo estudio histórico», comenta el concejal reproduciendo las palabras que le han traslado los vecinos del Casco Histórico Alto.

Los residentes de esta zona de la ciudad también han propuesto al Ayuntamiento una pequeña fiesta de reapertura de la calle Embajadores (aún cerrada) con música, bailes y disfraces. Pero aquí, el edil de la formación naranja se muestra más cauto por el hecho de que un evento de este tipo pudiera no proceder en el contexto actual de la pandemia.

Cabe recordar que el Ayuntamiento tuvo que recurrir a la ejecución subsidiaria para poder realizar labores de adecentamiento y de limpieza en el entorno y, aunque algunos de los propietarios sí accedieron a cumplir el requerimientos, hubo dueños que hicieron caso omiso a esta obligación.

Una larga pelea. El proceso para esta calle del centro histórico se inició en el anterior mandato, cuando la Concejalía de Licencias la ocupaba Ana Bernabé. La actual Corporación municipal heredó esta misión y sido ahora cuando el Ayuntamiento ha podido adjudicar el arreglo de este entorno para adecentarlo y, más pronto que tarde, poder proceder a su reapertura.
Los vecinos del centro histórico llevaban años reclamando una solución y ahora parece que empiezan a ver la luz.