La legislatura acabará sin los equipamientos anunciados

Ó.C
-

Siete fueron los proyectos destacados por los socialistas hace cuatro años y solo la recuperación de La Picota es una realidad hecha por la Fundación Coral. El Ayuntamiento ha empezado las obras para crear la nueva biblioteca en el antiguo Cervantes

La legislatura acabará sin los equipamientos anunciados

La legislatura llega a la recta final y en poco más de dos meses los mirandeses votarán en las elecciones municipales. Antes llegará la campaña, los partidos sacarán sus propuestas y desenterrarán grandes proyectos repitiendo la historia. Echando la vista atrás, hace cuatro años el PSOE mostraba siete grandes proyectos para dotar de nuevos equipamientos a la ciudad. Una lista ambiciosa de la que solo se ha cumplido una, la de la recuperación de La Picota, que se ha conseguido gracias a los fondos de la Fundación Coral, que ha invertido 350.000 euros en el proyecto. Una colaboración con la entidad que también va a facilitar la puesta en marcha del Museo del Ferrocarril.

Al margen de esto y quitando esta actuación privada en La Picota, por parte del equipo de gobierno socialista tan solo se puede lucir el avance de las obras en el antiguo colegio Cervantes, en el que se invertirán más de dos millones de euros para su transformación en una biblioteca. Un equipamiento al que se le dará diferentes usos, desde el universitario al infantil, pasando por la cesión de una zona a la Fundación Cantera Burgos. 

Este es todo el balance positivo en cuanto a las principales infraestructuras de la pasada campaña electoral. Sin embargo, en el ecuador de la legislatura la alcaldesa, Aitana Hernando, ya asumía las dificultades que estaban teniendo para lograr acuerdos, puesto que en las elecciones lograron el apoyo suficiente para poder gobernar, aunque en minoría. Una cuestión que, como ella misma explicaba a este medio, hacía inviable que se pudieran cumplir todas las mejoras anunciadas, sobre todo porque enfrente estaba, a su juicio, la «oposición más dura» de toda su trayectoria política.

En este sentido, el máximo exponente está en el proyecto más ambicioso, el de la nueva piscina climatizada. Una actuación que la semana pasada tuvo un frenazo definitivo dentro de la presente legislatura por el recurso de una empresa que hará que las obras ni siquiera empiecen. De esta manera se ha puesto un final en un proceso en el que se han ido intercalando parones prácticamente con cada decisión municipal. 

Para la piscina, al menos, existía un previsión con unos 3,5 millones de euros de gasto, aunque en algunos de los equipamientos anunciados ni siquiera se ha llegado a fijarse públicamente las cuantías económicas que se necesitarían. Esta circunstancia se ha vivido con otro de los proyectos anunciados que afectaban al mundo del deporte, con un nuevo pabellón en el Polideportivo previsto en la zona junto a las pistas de tenis, aunque en cualquier caso se ha quedado sin que se arranque el proyecto. 

Tampoco se ha llegado a incluir dentro de los presupuestos de la legislatura la renovación de la segunda planta de la Plaza de Abastos. Eso sí, al menos sí que ha ocupado un espacio públicamente, puesto que el equipo de gobierno anunció que la obra se tenía que relegar ya que el techo de gasto impuesto al Ayuntamiento obligaba a posponer esta mejora.

Otra de las promesas que no se ha logrado dentro de los equipamientos es la adecuación del antiguo edificio de los Servicios Sociales en la calle La Fuente, para destinarlo a las asociaciones de la ciudad. El equipamiento se fijó en los 200.000 euros, incluyéndolo en líneas de ayudas europeas, aunque tampoco se ha podido avanzar.

Por último, uno de los grandes proyectos que ha pasado casi desapercibido a lo largo de la legislatura ha sido la construcción del recinto ferial.En el programa electoral socialistas se matiza que este objetivo se debería de hacer «por fases», aunque esto no se ha producido. En el 2009 ya se presentó un proyecto de más de 35.000 metros cuadrados, con una inversión de 1,5 millones de euros, aunque en su momento se quedó fuera del Plan Estatal de Inversión Local, a la espera de nuevas convocatorias.

Al margen de estos equipamientos, otras propuestas de inversión también se han quedado fuera. Una de las más llamativas es la peatonalización de Comuneros de Castilla, para lo que se necesitaba más de un millón de euros.