El Ayuntamiento de Briviesca, consciente de que la plantilla de la Policía Local necesita con urgencia incrementarse, pretende convocar una plaza de oficial externa tras el fracaso de las dos últimas internas, a las que ningún agente que formaba parte de la plantilla se presentó.

El oficial jefe se jubilará en marzo y al municipio le corre prisa ofertar cuanto antes el cargo. Como a nadie le interesó, el equipo de gobierno pretende dar la oportunidad a profesionales de otros lugares. Con el traslado de cuatro agentes a Burgos en febrero de 2021 después de aprobar las pruebas de selección, el personal municipal quedó reducido a cinco agentes -dos de ellos interinos- y un oficial, una cifra que queda lejos de la que marca la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Consistorio, que indica que tiene que haber 10 agentes, 2 oficiales y 1 subinspector.

El Ayuntamiento burebano se adhirió al convenio suscrito entre la Junta y la Federación Regional de Municipios y Provincias para la gestión coordinada de los procesos selectivos del colectivo y han solicitado cuatro agentes,  por lo que las convocatorias de las pruebas dependen de la administración regional. Briviesca simplemente aprobó en junta de gobierno la necesidad de la anterior oferta pública de empleo y «mientras no resuelva la convocatoria y los seleccionados no puedan acudir a la academia continuaremos en la misma situación», explica el alcalde de la ciudad, Álvaro Morales.

Ante la falta de personal en el servicio briviescano, el equipo de gobierno, muy a su pesar, poco puede hacer. Para el regidor, lo correcto sería «sacar un cuerpo autonómico como puede ser el de profesores o sanitarios y que los candidatos, por puntuación, eligiesen. Así se cubrirán todas las plazas y en el caso de que alguien cause una baja se solicitará a la Junta el siguiente de la lista para que trabaje en el municipio», aclara. Morales defiende que de esta manera «siempre habría personal disponible porque a día de hoy las ciudades y municipios más grandes siempre se llevan a nuestros policías después de formarles. Cuando un problema es global de todos es ahí donde se tienen que implicar las administraciones superiores, ya sea ofertando plazas o legislando las fases de acceso a las mismas», añade.

Hay que tener en cuenta que las retribuciones, por ejemplo en Burgos, son superiores que en la capital burebana, y que además, en el caso de que residan en la ciudad, se ahorran el desplazamiento. Este corresponde con el principal motivo por el que los agentes que fueron destinados a la ciudad se marcharon en cuanto tuvieron oportunidad.

Sin servicio nocturno.

La reducción de la plantilla «imposibilita en la actualidad a patrullar en turno de noche e incluso operar por las tardes», explica el regidor, que detalla que se da prioridad a los servicios que se quieren cubrir entre semana por las mañanas en horario de entrada y salida de los colegios, el trabajo rutinario relacionado con el tráfico y controlar los horarios de carga y descarga. Además, los sábados es importante la presencia policial porque hay mercadillo y más circulación.

No obstante, Morales recuerda que «Briviesca no está obligada a tener Policía Local porque la Guardia Civil es la encargada de la seguridad ciudadana en el medio rural».