«Me encantaría pelear por el empoderamiento del autor»

Pilar Martín (Efe)
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Pilar Jurado, cantante de lírica de la SGAE, reconoce que la institución se juega su futuro dentro de dos semanas con la aprobación de la cuentas de la entidad y la unión de todos

Aunque reconoce la complejidad  que vive la SGAE, la presidente de la Sociedad de Autores, Pilar Jurado, avanza que «por primera vez parece que hay rayitos de luz», y lo afirma a falta de dos semanas para que la institución viva un momento «trascendental»: la aprobación, o no, de sus estatutos.

Así lo considera Jurado, quien califica de «positiva» la expulsión temporal de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores (Cisac) y pide «responsabilidad» a los socios de cara a la próxima asamblea, porque, de no salir adelante los nuevos estatutos, los autores perderían su «empoderamiento».

¿Qué sería de España sin la SGAE?

«Me encantaría pelear por el empoderamiento del autor»«Me encantaría pelear por el empoderamiento del autor» - Foto: Eduardo ParraMás allá de qué sería España sin la SGAE, es qué sería la cultura en español sin la SGAE, porque va mucho más allá de nuestro país, es realmente el colectivo de autores que decidió pelear por sus derechos y que hace 120 años crearon una entidad que les proteja.

Estamos hablando de recaudaciones muy grandes, cuyo impacto en la fiscalidad es fundamental; si hacemos que esta entidad no funcione, aprovecharemos para que nuestro repertorio vaya a otras entidades de otros países.

¿Cómo definiría el momento que vive la SGAE con la expulsión temporal de la Cisac?

Es verdad que estamos en un momento complejo, pero por primera vez parece que hay rayitos de luz.

Es un aviso muy importante para que todo el mundo se alinee y haga lo que tiene que hacer, que es sacar adelante esos estatutos que son fundamentales.

¿Hace una lectura positiva de la expulsión de la Cisac?

Es que lo fue. Fue la primera vez que deciden hacer algo que se sale incluso de sus propias pautas.

¿Está contenta con las actuaciones del Ministerio de Cultura?

Lo que se nos está achacando es que durante estos años no ha habido una gobernabilidad clara, que no se han dado los pasos que se tenían que dar o que no se ha ido lo suficiente deprisa para hacer las reformas. Ahora hemos estado en plan supersónico y de la decisión de los socios dependerá definitivamente el futuro de esta entidad.

¿Qué pasaría si no se aprueban los nuevos estatutos?

Sería la última vez que los autores realmente han sido los dueños de esta casa y seguramente el modelo de gestión que se llevase adelante cambiaría muchísimo y perderíamos algo único, que es algo por lo que me encantaría pelear: el empoderamiento del autor.

¿Qué les diría a los autores del Colegio Audiovisual y de Gran Derecho que piden la segregación de la SGAE?

Pediría un poco de responsabilidad, los intereses personales no pueden estar por encima de los de una entidad como SGAE, y por desgracia siempre digo que por encima de mí está el bien de esta entidad.

Creo que todos deberían decir lo mismo porque estamos en un momento crítico en el que es fundamental que todo el mundo se una y entienda que los autores tenemos que salvar a nuestra entidad con responsabilidad en la próxima asamblea general votando sí a los estatutos y a todas las cuentas.

¿Cree que ese mensaje ha calado entre los socios de la SGAE?

Estamos haciendo que llegue. Hay que ir a votar sí a la SGAE y sí a su futuro. Jamás nos hemos encontrado en un momento tan trascendental.