La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha asegurado que la reversión de Hospital de Burgos (HUBU) podría producirse esta legislatura y es cuestión de "poco tiempo", en esta legislatura, pero ha condicionado hacerla efectiva a que no tenga un coste que ponga en peligro la financiación del sistema sanitario de la Comunidad.

Casado, en una entrevista concedida a Europa Press, ha explicado que la prioridad es "organiza bien" el hospital y su "estabilización" en términos funcionales, al igual que el resto de centros hospitalarios, porque se trata de un centro público, que tiene que ser puntero.

En este sentido, ha aclarado que la mayor parte de las sentencias que derivan de la judicialización de la concesión las gana la Junta, pero también ha reconocido que ahora mismo "no viene mal" que la empresa adjudicataria se haga cargo del mantenimiento de determinadas cosas.

Aún así, ha señalado que no se pierde el "objetivo" de revertirlo y vuelva a ser "totalmente" de la Consejería, aunque ahora mismo sea un hospital público y la gente es atendida por personal que es del sistema "público".

"POCO TIEMPO"

Casado, quien ha recordado que está pendiente de crearse una comisión en las Cortes para este fin, ha afirmado que cada vez tienen "más claro" la reversión y cree que va a ser cuestión de poco tiempo. "Nuestro objetivo es ver si lo si en esta legislatura lo podemos dejar dejar zanjado", ha asegurado la consejera.

Aún así, ha aclarado que se quiere revertir "siempre y cuando no ponga en riesgo la financiación de todo el sistema sanitario de Castilla y León", es decir, si cuesta "lo menos posible" y no pone en riesgo el mantenimiento de otros hospitales u otras inversiones.

Por ello, ha condicionado la reversión a una mejor situación económica a lo largo de la legislatura que permita hacerlo sin "trastornar" los presupuestos del sistema sanitario.

De esta forma, ha apuntado que hay muchas más "claves" y cuestiones "más importantes" que son una prioridad antes que la reversión.