La mortalidad media diaria por la enfermedad del coronavirus se ha reducido en Burgos en más de un 50% desde el comienzo de la campaña de vacunación, que coincidió con el arranque del 2021. En estos tres meses y medio se han certificado 130 defunciones por la covid, lo cual supone una media de 1,2 fallecidos al día. En 2020, en las 289 jornadas pandémicas de las que hay datos oficiales -la serie comienza el 18 de marzo- se registraron 862 víctimas mortales, entre residencias y hospitales, lo cual revela una media de casi tres fallecidos al día (2,98), según datos oficiales.

La diferencia es significativa y, aunque puede haber repercutido la menor virulencia de las dos oleadas de 2021 con respecto a las del año pasado -la de noviembre ha sido, con mucho, la peor para Burgos hasta la fecha- o la reducción de la edad media de los pacientes, es una evidencia que la vacunación es un factor diferencial.

Sirva como ejemplo la realidad de las residencias de ancianos: hoy encadenan el primer mes sin víctimas mortales desde el pasado julio, que hasta ahora era el único que se había podido cerrar sin defunciones por la covid. El contexto general de la provincia era entonces de casi ausencia de contagios (en las tres primeras semanas del pasado julio se notificaron 14 y, en todo el mes, menos de 70; lo mismo que ahora en un día), mientras que en este momento Burgos está en la cresta de un repunte que, parece, empieza a ceder.

(Más información, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)